El pasado 18 de octubre falleció Julio Díaz, de 55 años de edad, víctima de un ACV. Integró el Polo Obrero, más precisamente participaba de la asamblea del Barrio Guiñazu. Hace años que se sumó a la lucha por trabajo genuino, tierra y vivienda. El compañero rompió con el MTE por rechazar sus métodos punteriles, y, hasta donde pudo, fue un activo participante de los planes de lucha de la Unidad Piquetera.

En una movilización del Polo Obrero realizada en el microcentro de la ciudad, Julio tomó contacto con la organización. Fue uno de los primeros compañeros que se pasaron del MTE al Polo Obrero. Él convenció a todos sus compañeros para dejar las filas de una organización que los explotaban: allí los obligaban a sembrar o desmontar campos, el referente vendía la producción y los compañeros no veían una moneda.

Julio encontró en el Polo Obrero un método de organización y lucha para mejorar sus condiciones de vida. Fue una expresión de todo un proceso de ruptura de compañeros con organizaciones sociales que por apoyar al gobierno no salen a la calle a defender los reclamos populares.

En sus últimas palabras a sus familiares pidió que avisaran a sus compañeros de militancia y pidió ser enterrado con una bandera del Polo Obrero. Lo que muestra hasta qué punto Julio abrazó el programa de la organización piquetera del Partido Obrero y llevó adelante su método para cambiar la situación de las barriadas populares.

Sus compañeros de asamblea lo recuerdan con sentidas palabras: “Se nos fue un gran compañero, siempre estuvo apoyando al Polo en los reclamos, nos dejó una gran enseñanza”.

Saludamos a sus familiares en estas horas de dolor, y, con el puño en alto, nos comprometemos a continuar la lucha, como lo hacía el compañero, para que la tierra sea para lxs trabajadores no para especuladores, para sacar a las familias de la pobreza e indigencia.

Compañero Julio Díaz, que pena tener que decirte; “hasta la victoria siempre, venceremos”.

https://prensaobrera.com/movimiento-piquetero/cordoba-la-accion-del-polo-obrero-hacia-el-acto-de-la-izquierda-y-las-luchas