Delia Cecilia Giovanola, una de las fundadoras de Abuelas de Plaza de Mayo, murió este lunes a los 96 años. Se fue con la tranquilidad de haber encontrado a su nieto, Martín, robado por la dictadura, en 2015. Nació en 1926 en la ciudad de La Plata y en 1946 se casó con Jorge Narciso Ogando con quien tuvo a su hijo, Jorge Oscar Ogando. En la madrugada del 16 de octubre de 1976, una célula del gobierno de facto secuestró a Jorge (su hijo) y a su compañera, Stella Maris Montesano, en su casa de La Plata. Ambos militaban en el PRT-ERP. Ella estaba embarazada de ocho meses y ya tenían a Virginia, que había nacido en 1973.

Delia se hizo cargo de su nieta y, años más tarde, por testimonios de sobrevivientes, se supo que la pareja estuvo en el centro clandestino de detención “Pozo de Banfield”, donde Stella Maris, que era abogada, dio a luz un niño el 5 de diciembre de 1976. En octubre de 1977 Delia se jubiló para dedicarse a la crianza de Virginia y se integró al grupo fundador de Abuelas de Plaza de Mayo para buscar a su nieto. “Cada vez que veía un chiquito lo seguía con la vista pensando ‘¿será mi nieto?’. Era muy dura la búsqueda”, recordó Delia durante su testimonio de 2021 en el juicio por los delitos de lesa humanidad cometidos en Pozo de Banfield, Pozo de Quilmes, Infierno y Brigada de Lanús.

Luego de muchos años de lucha, de rondas en Plaza de Mayo y de organización en defensa de los derechos humanos, Delia encontró a su nieto Martín y siguió buscando a su hijo y a su nuera hasta el fin de sus días. Lamentamos su fallecimiento y seguiremos exigiendo justicia por los 30.000 detenidos desaparecidos y por el castigo a todos los culpables con cárcel perpetua y efectiva.