Lejos de Mar del Plata, falleció hoy, Raúl Comparada. Hace unas 3 décadas lo conocí cuando como integrante del Comité ya jugaba un importante papel en el Partido. Había llegado a nuestras filas emigrando de las simpatías juveniles en el peronismo, junto a un grupo de amigos.

Constructor de oficio, supo transmitir otro difícil arte: el de construir una organización política para luchar por el poder de los trabajadores. Fue durante varios lustros, indiscutiblemente, la columna vertebral de la regional como responsable de Organización, en períodos de grandes desafíos partidarios, como la época del “Argentinazo” y de la conquista clasista del SOIP.

Dueño de un carácter “cabrón”, supo tener gestos de gran calidez y solidaridad con todos sus compañeros, incluyéndome, por supuesto. Alejado de Mar del Plata, en su nuevo lugar en el mundo -Aluminé, provincia de Neuquén- se había dedicado a una gran pasión, la pesca, que fue también su sustento de vida.

Siempre solidario con el Partido Obrero. Seguimos a la distancia el proceso de su enfermedad, a través de su enorme compañera de la vida, Claudia, y nos quedamos con la deuda imposible de saldar de un gran abrazo. Un abrazo fraterno a Claudia, a sus hijos Julia y Damián y a sus nietos, a su hermana Patricia, a Pedro y a toda su familia y amigos. Hasta la victoria siempre, compañero Raúl.