Partido

9/1/2004|835

Con el periódico en la mano, organizar y reclutar

La campaña por popularizar la Prensa Obrera, convertirla en un vocero de los explotados y en una guía para la acción de miles de compañeros, es la tarea central de los militantes revolucionarios del Partido Obrero, y ha sido abrazada con pasión por muchos de los mejores luchadores del Polo Obrero. Refleja la conciencia de la necesidad de una estrategia y de un partido de clase. La lucha por las 10.000 se viene desenvolviendo, no sin dificultades. Se reflejó en la creciente venta de los primeros 60 días de campaña. Pero la venta de diez mil periódicos no puede ser un "mes de la prensa" o episódico. Tiene en consideración, en el momento presente, los precisos ejes que nos plantea la situación política. Por eso, tampoco es un llamado a simplemente reforzar la venta a costa del descuido de otras tareas.


Para llegar, hay que reclutar


La tarea de popularizar la prensa requiere una revisión, en muchos casos, del carácter de la actividad militante. En primer lugar, reconsiderando críticamente sus ejes. Homogeneizando cada círculo, ayudando a pasar la prensa en mano y a organizar piqueteos, persuadiendo a los familiares, amigos, compañeros de trabajo y vecinos para que la compren, armando así un padrón. Organizar con la salida de cada número, el análisis y caracterización de su contenido, para mejor ofrecerlo, y ayudar a la politización y facilitar el reclutamiento para el partido. Armando muy cuidadosamente el piqueteo en cada barrio y frente, y balanceando número por número cuáles son las posibilidades de reclutamiento y de organización que se han abierto. No se trata sólo de las indispensables reuniones y charlas de carácter más o menos general, sino el seguimiento particular de cada compañero que ha dado un paso hacia nosotros. Para ganarlo como pasador del periódico y para incorporarlo al Partido. Para que una vez incorporado sea un nuevo puntal para ampliar la prensa. Esto reclama una atención particular.


Debemos acá tener en cuenta que nuestra corriente concita la atención de individuos y también de contingentes de luchadores, que ven en el Partido y en el Polo la referencia más consecuente para luchar por una dirección revolucionaria.