En Boedo, con la venta de Prensa Obrera Nº 832, se dio un salto significativo. En comparación con el periódico anterior (31 prensas rendidas) se colocaron 50 periódicos más, llegando a un total de 81.

La colocación se realizó de la siguiente manera: 26 en la olla, 2 en la marcha por la Semana Trágica, 5 en la visita a una casa del Barrio Rivadavia, 22 en la Asamblea, 7 en la entrega de alimentos, 12 en la casa de Colombres, 5 suscripciones internas y 2 contactos. Hay que tener en cuenta que por el mal tiempo no pudimos hacer el piqueteo del último sábado.

Tan buen resultado no se debió a que los militantes somos oráculos vendedores ni tampoco al azar, sino a un análisis previo acerca de con qué ángulo, tema o cuestión política debíamos comunicar la prensa.

Este fenómeno es el reflejo, por ejemplo, de que los compañeros que asistieron a la olla comprendieran la lucha de Vanina Kosteki y el Polo Obrero contra el gobierno de Solá, o que en la Asamblea se viera la importancia del avance del movimiento piquetero luego del 20 de diciembre, retomando la iniciativa política y la responsabilidad que esto significa para el futuro inmediato. Debemos resaltar la atención que concertaron el discurso de Altamira en el Pic-nic y la nota de Ramal sobre el desalojo de Venezuela 2887, del que fueron víctimas integrantes de nuestra Asamblea.

También debemos aprovechar más que nunca el nivel y la claridad política de Prensa Obrera, que a través de sus artículos demuestra una gran profundidad de análisis, tanto en el ámbito económico como en el financiero.

Además, estamos por organizar una charla con una cantidad importante de compañeros bolivianos que concurren a nuestra Asamblea para debatir sobre la revolución boliviana, aprovechando la oportunidad para presentar la revista En Defensa del Marxismo Nº 32, donde abundan los artículos sobre los últimos hechos revolucionarios de ese país.

Orgullosos por el resultado vamos por más, vayamos por los 10.000 periódicos, aprovechemos la oportunidad política que nos brinda la historia.