La semana pasada ha sido pródiga en señales de que también en el Chaco estamos en una nueva etapa política.

Mientras Rozas intenta en vano distanciarse del resto del pelotón de los fracasados planteando la “refundación” de la UCR, la vanguardia piquetera chaqueña comienza a procesar la situación política incorporándose al Partido Obrero.

En el marco de lo resuelto por el reciente Congreso regional del Partido Obrero, hemos lanzado una campaña por la derogación de la repudiada Ley de Cacheo, que habilita la requisa policial sin orden de juez competente, alentando las arbitrariedades policiales de todo tipo, incluyendo el saqueo de pertenencias y la tortura en las comisarías.

La campaña se llevó adelante en Resistencia y Barranqueras con el reparto de miles de volantes en barrios y escuelas, la firma masiva de un petitorio contra la ley, y la invitación a todos los trabajadores y la juventud a una movilización por estas reivindicaciones, que se desarrolló el día miércoles 10 de julio.

El día anterior a la movilización, el Bloque Piquetero (MTL, 17 de Julio, Polo Obrero, Villa Federal) y Barrios de Pie desfilamos frente al palco oficial durante el acto del 9 de Julio, escrachando a Rozas, a su gabinete y a todos los diputados oficialistas y “opositores”, al grito de “Que se vayan todos, que no quede ni uno solo” y “Aquí están, éstos son, los que roban la nación”, aplaudidos por gran parte de la concurrencia.

Verdaderamente unitarios

Mientras la UJS y el PO lanzaban su campaña, un delegado de la Unión del Personal Civil de la Provincia sufrió en carne propia las vejaciones que permite a la policía la Ley de Cacheo, pues fue detenido y maltratado junto a sus hijos, en virtud de la nueva normativa.

Esto provocó que el Cuerpo de Delegados de la UPCP convocara a las asociaciones de abogados del medio (Colegio y Consejo), a la CTA, la CCC, organismos de derechos humanos, organizaciones piqueteras y partidos políticos, para debatir la situación planteada.

A instancias de la CCC y con la anuencia del movimiento 17 de Julio y el MTL se aprobó una movilización sin banderas a la Cámara de Diputados para que sea “unitaria”, dijeron, en coincidencia con la campaña de la UJS-PO.

Teniendo el mismo objetivo, anunciamos nuestra decisión de concurrir, pero que no estábamos dispuestos a bajar las banderas, porque esto escondía la pretensión de armar un acuerdo con los partidos que sancionaron la ley –UCR, PJ–, cuyas banderas seguramente no serían toleradas.

Ante la resolución tomada, también el Polo Obrero se sumó a la movida. Los delegados de los movimientos recientemente incorporados (Almafuerte, 25 de Julio, Facundo Quiroga, Villa Los Lirios, Villa Nueva, Villa Palermo I, General San Martín de Resistencia y Barranqueras) recorrieron las barriadas y los asentamientos difundiendo la movilización.

A la hora de la cita, decenas de compañeros nos reunirnos bajo las banderas del Polo Obrero, de la Unión de Juventudes por el Socialismo y del PO en el Mástil Mayor de la ciudad. Emocionados y sólo en compañía del Bloque Piquetero (desertaron la CCC, la CTA y las asociaciones de abogados, etc.), comenzamos a marchar a la Legislatura, cantando a viva voz.

Mientras las banderas del Polo y de la UJS-PO encabezaban una columna de más de una cuadra, los compañeros del MTL y del 17 de Julio vacilaron, pero entendiendo que la movilización igualmente se realizaría y que la CCC y la CTA no iban a aparecer, marcharon con nosotros a la Legislatura.

Echan lastre

Minutos antes de la llegada a la Cámara, y mientras se sumaba una columna de la FTV, una noticia sacudió a los presentes: los diputados se aprestaban a votar un proyecto de ley de modificación del Código de Faltas de la Provincia del Chaco, para encarcelar a quienes corten calles u obstruyan la circulación en las ciudades de algún modo. Hasta el momento, y a pesar de su “obediencia debida”, la jueza de Faltas se veía generalmente impedida de aplicar la legislación antipiquetera que ya existe, porque no podía probar la “malicia” de ninguna protesta.

Los funcionarios de protocolo aparecieron para avisarnos que nos esperaba el presidente de la Legislatura y los presidentes de los distintos bloques (Alianza Frente de Todos, Frente Grande, Partido Socialista, Partido Justicialista, etc.). Dentro del reci nto, y acompañada de delegados de todas las organizaciones presentes, la dirigente de Barranqueras, Gloria Rivero increpó a viva voz al diputado del PJ, Juan Carlos Saife –reconocido penalista del medio– acusándolo de ser el cerebro de la Ley de Cacheo y del proyecto antipiquetero de reforma del Código de Faltas. Visiblemente shockeado por la acusación, Saife aprovechó el momento para echar lastre y poner a disposición de los presentes “su” banca. Mientras tanto, se hacían los osos en cuanto a la derogación de la Ley de Cacheo (no hubo ningún compromiso en ese sentido), aunque se comprometieron a pasar a comisión el nuevo proyecto.

Primera victoria: vamos por más

Mientras tanto, en la calle, los discursos denunciaban al gobierno y a los diputados por la sistemática violación de los derechos humanos, y que la Ley de Cacheo estimuló la tortura en las comisarías y calles.

Durante los días siguientes, los diarios reflejaron con estupor la situación: “Piqueteros lograron frenar un proyecto” (Norte, 11/7); “Genera malestar prohibición de cortes” (La Voz del Chaco, 12/7), y las radios de frecuencia modulada comentaron todo el tiempo la masividad de las columnas del Polo Obrero y de la UJS-PO.

Bajo el subtítulo “Saife también se va”, Norte (12/7) comentó preocupado: “… el abogado y diputado chaqueño Juan Carlos Saife, habría analizado con sus colaboradores presentar su dimisión al cargo que ocupa (…). Una protesta de los desocupados antes de la sesión del miércoles habría sido el detonante para que Saife –renombrado penalista y cabeza de lista del PJ en las últimas elecciones, D.G.– reúna a su tropa y analice su alejamiento como diputado”.

Redoblar la movilización

En los días siguientes a la movilización se masificó la firma del petitorio en las barria das de Barranqueras (uno de los epicentros de la represión policial –ver denuncia en PO anterior–), y los compañeros se preparan para hacer aún más numerosa la movilización que se votó para el miércoles 17/7 hasta lograr la derogación de la ley y el retiro del proyecto antipiquetero (cuyo tratamiento se difirió con tratamiento preferencial para el 24/7).

Una reunión de los participantes de la primera movilización logró incorporar a la discusión a la CCC, que se comprometió a participar en la próxima. Que así sea.