El sábado 11, el comité Lanús inauguró con una fiesta un nuevo local.

La actividad fue un éxito por la concurrencia (más de 50 compañeros) y por la calidad de los asistentes. El 80% eran jóvenes, entre los que se destacó un grupo de un colegio de V. Alsina; un grupo de jóvenes obreros de la zona de Solano; un activista textil (con el cual venimos discutiendo la organización de su fábrica, donde tiene posibilidades reales de ser electo como Comisión Interna) y un grupo de delegados y activistas gráficos.

El éxito de la fiesta se encuadra en la orientación y actividad de la regional y es su fruto.

La regional ha cobrado vida a partir de la incorporación de algunos compañeros de la juventud (cinco) y se ha conformado un equipo de la UJS con siete compañeros, donde los principales frentes que se atienden son dos colegios secundarios y la fábrica donde trabaja el compañero textil antes nombrado.

El giro de la situación política se verifica en la afluencia de un sector de la juventud hacia las posiciones del partido, hecho que nota la regional en la campaña por la legalidad, donde más del 60% de las afiliaciones corresponde a menores de 28 años.

Aparte del seguimiento de nuestro trabajo en los dos colegios donde tenemos compañeros, la misma tarde de la fiesta se hizo una reunión en el local con seis activistas de distintos colegios de la zona, donde se discutió la formación de centros de estudiantes en esos establecimientos y el método y la política para llevar adelante el trabajo.

A partir de aquí, al comité Lanús se le abre una perspectiva de desarrollo en el seno de la juventud estudiantil y trabajadora, y el nuevo local tiene que convertirse en el lugar de referencia y aglutinamiento para esta tarea, como un lugar de reunión y organización, pero también para el desarrollo de actividades como cine o peñas, donde la juventud tenga un ámbito de encuentro también para el esparcimiento, como otra de las formas de agrupamiento.