Para el próximo 4 de febrero, el Partido Obrero regional Córdoba convoca un plenario abierto con el objetivo de impulsar un congreso del Frente de Izquierda que reagrupe a todo el activismo obrero, ocupado y desocupado, de las mujeres y diversidades, de la juventud y del resto de los movimientos populares; y de esa forma desplegar una enorme fuerza política de los trabajadores. La convocatoria provincial contará con la presencia de cientos de delegados y se realizará en el marco del plenario abierto nacional convocado para el próximo 11 de febrero. Un congreso del Frente de Izquierda es sumamente necesario en Córdoba, la provincia viene atravesada por masivas luchas obreras y populares que se desarrollaron durante todo el 2022.

En primer lugar, existe un enorme movimiento piquetero que se extiende por toda la provincia y que organiza a decenas de miles de trabajadores, encabezados por el Polo Obrero y la Unidad Piquetera. El desarrollo del movimiento piquetero es la respuesta a la extrema pobreza (40%) que impera en el distrito, donde la indigencia llega al 10% de la población. Un coctel de congelamiento salarial, desocupación y precariedad laboral va hundiendo al pueblo trabajador. La mitad de las personas necesitan trabajo o más trabajo, y el bloque desocupados-subocupados asciende al 26%. En tanto, el 52% de las y los trabajadores privados son informales.

Durante el año pasado se desarrollaron masivas movilizaciones de la docencia y de la salud, y de distintos sindicatos municipales como en capital o Jesús María. Las huelgas autoconvocadas u organizadas desde las bases terminaron quebrando los acuerdos miserables que habían cerrado las burocracias sindicales, que en un acto de desvergüenza pidieron la aplicación de esos aumentos arrancados con la lucha. La fuerza y masividad que cobraron estas luchas tenían como antecedente el crecimiento de la recaudación fiscal por encima de la inflación, lo que no se refleja en los salarios que corren por detrás la inflación. Si alguien pregunta de dónde sale el dinero para las obras que se hacen en Córdoba, la respuesta es muy simple: las paga el trabajador con pobreza y congelamiento salarial.

El 2022 también mostró abiertamente la descomposición del régimen peronista local. Las muertes de bebés en el Neonatal terminó con la expulsión e imputación del ministro de Salud. La ventilación del juicio por el asesinato de Blas Correas comprobó la impunidad con la que se mueve el aparato represivo, y la muerte de una conductora vial por responsabilidad del presidente provisorio de la Legislatura, Oscar González, expresó la corrupción generalizada del gobierno de Juan Schiaretti.

Todas estas causas, y muchas más, dieron lugar a procesos de movilización popular que fueron enfrentando en las calles al gobierno provincial, al gobierno nacional, a la clase capitalista y al régimen del FMI. La oposición de Juntos por el Cambio se “diferencia” de los Fernández y de Schiaretti para ver quien lleva más a fondo el ajuste. Todo el debate en la clase capitalista gira en torno hacia como se hacen las reformas, si de shock o gradualmente. En una reciente reunión de los jefes de los partidos de Cambiemos con Domingo Cavallo, Luis Juez expresó que se busca darles garantías a los empresarios.

En este cuadro de crisis, en el marco de una latinoamérica conmocionada por el golpe genocida en Perú, urge la intervención política de las y los trabajadores. Experiencias como las que desenvolvieron el año pasado son un antecedente importante, como fueron la marcha federal y los acampes de la Unidad Piquetera, o la lucha del Sutna y de la docencia. En un momento se desarrolló en la provincia un plenario de ocupados y desocupados donde se concentraron la CTA, el Sutna, ATE, Químicos, Sitram, el Polo Obrero y varios sindicatos y organizaciones más planteando el paro nacional y plan de lucha.

El Frente de izquierda está llamado a tomar la iniciativa, por eso proponemos la convocatoria a un Congreso junto a las y los luchadores; para resolver un programa, un plan de acción, y listas unitarias para el proceso electoral que tenemos por delante. El plenario abierto del Partido Obrero en Córdoba debatirá a fondo estas tareas y resolverá un plan de acción política para llegar a todos los lugares de trabajo, de estudio y a las barriadas. También resolveremos una propuesta de candidatos para el FITU y de programa que estará encabezado por nuestras consignas principales: que se vayan los políticos capitalistas. Por un gobierno de los trabajadores y la izquierda, por un movimiento popular con banderas socialistas. Convocamos a todas y todos los luchadores a participar de este gran plenario.

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