Daniel sacó conclusiones fundamentales del conflicto que paralizó durante 32 días Río Turbio. Denunció la política centroizquierdista de Ate que sirvió a los intereses patronales aislando y hundiendo el conflicto, dijo, junto al gobernador y el obispo, Daniel desenmascaró al gremialismo ‘opositor´ que se escuda bajo el slogan de ‘que banca’. Pero Ate no sólo ‘no banco’, dijo, sino que cerró sus locales en el Turbio y en Gallegos. Los únicos que ‘nos bancaron’, afirmó, fueron los compañeros de Adosac, el gremio docente, que no solo pusieron sus locales sino que “puso todo su aparato a nuestro servicio”.

Daniel reivindicó el rol de las mujeres en el conflicto y llamó a construir el Partido Obrero.