Partido

28/10/2004|874

Uruguay: un gobierno de capitalistas y terratenientes

Discurso de Rafael Fernández

Salud, compañeros.


Es un orgullo para nosotros estar en este acto obrero, en este acto socialista y en este acto piquetero; y es nuestra obligación como trabajadores, es nuestra obli­gación como luchadores, empezar nuestro acto recordando, homena­jeando a. los compañeros que están presos por luchar en las cárceles de Kirchner, y reclamar por su liber­tad. Que cese su represión, que ce­sen los procesos judiciales, que ter­mine esta política de represión que lleva adelante el supuesto gobier­no progresista, nacional y popular.


Compañeros: en una semana, el 31 de octubre, en Uruguay va a haber elecciones, y está anunciado un gran cambio que sería el acceso al gobierno, por primera vez, de una fuerza de centroizquierda, el fin de los gobiernos de los partidos tradicionales de la burguesía, los blancos y los colorados.


Este gobierno de centroizquier­da se produce dos años después de otra experiencia en Brasil con el gobierno de Lula.


Como dijo el compañero que me presentó, hace pocos días, en el ho­tel Alvear, el futuro ministro de Economía de Tabaré Vázquez (el presidente del Frente Amplio) fue ovacionado por los grandes capita­listas y banqueros en la Argentina, porque les aseguró que sus nego­cios iban a ser preservados por ese gobierno de centroizquierda; que no se iban a tocar las AFJP de Uru­guay, es decir, la jubilación priva­da, el robo del dinero de los traba­jadores; que no iban a tocar el se­creto bancario a través del cual Menem trianguló el dinero para la venta de armas, a través del cual se ha hecho la evasión de impues­tos de los capitalistas argentinos, a través del cual se han hecho todos los negocios de las coimas por par­te de los políticos de toda la región. Se va a mantener el secreto banca- rio, les aseguró. Les aseguró tam­bién que se va a pagar peso a peso la deuda externa, una deuda ex­terna que supera lo que produce el país en un año: es el 110% del pro­ducto bruto.


Un país que ha sido completa­mente saqueado por la banca in­ternacional, igual que la Argenti­na. Un país en el cual el 60% de los chicos menores de 14 años está por debajo de la línea de pobreza y más del 30% de la fuerza de trabajo es­tá desocupada. Un país completa­mente sometido y hambreado por la banca internacional. A estos banqueros, a estos capitalistas, a estos explotadores, los centroizquierdistas, estos supuestos pro­gresistas del Uruguay, Ies prome­ten: ‘no les vamos a tocar los nego­cios, vamos a seguir hambreando al pueblo para pagar la deuda y va­mos a seguir llevando adelante la política de privatizaciones’. Esa es la promesa electoral de la supues­ta centroizquierda progresista en el Uruguay.


Ya lo vivimos en la experiencia de Brasil, con el gobierno de Lula, que ha cumplido con todos los re­querimientos y los mandatos del Fondo Monetario, aun mejor que los gobiernos capitalistas anterio­res, y, por lo tanto, es un gobierno de capitalistas y banqueros. Hacia eso vamos también en Uruguay.


Compañeros: hace poco tiempo, pocas semanas, tuvimos el orgullo de recibir en Uruguay, en un acto de la Unión de Trabajadores Deso­cupados (UTD), al compañero Nés­tor Pitrola, por el Polo Obrero. Y el conjunto de los partidos patrona­les, los partidos tradicionales de la burguesía, los blancos y los colora­dos pero también los centroizquierdistas, la burocracia sindical de izquierda; todos ellos se lanza­ron a una furiosa campaña antipi­quetera. Proponían aplicarle al compañero una ley del año 1934, de corte fascista, que les permitiría expulsar a un luchador de otro pa­ís. Una ley de indeseables. Para ellos, para los colorados, los blan­cos y también para el Frente Am­plio, los piqueteros son indesea­bles, deberían ser expulsados y no debería permitirse su ingreso al Uruguay.


Compañeros: ante esto, la Unión de Trabajadores Desocupa­dos y el Partido de los Trabajado­res plantearon que el indeseable aquí es el Fondo Monetario Inter­nacional, con el que se siguen reu­niendo todos los capitalistas; son los banqueros, son los dueños de la jubilación privada, son los que ro­ban los ahorros jubilatorios, son los que hambrean al pueblo. Hay que aplicarles Ja ley de los indese­ables al FMI, hay que aplicarle la ley de los indeseables a los capita­listas, y que gobiernen los traba­jadores.


Nosotros impulsamos en Uru­guay, y lo decimos claramente, un movimiento piquetero de lucha unido de trabajadores ocupados y desocupados; luchando juntos, con piquetes, huelgas y con la huelga general, es el camino por el que se van a conquistar las reivindicacio­nes y también por el cual la clase obrera se prepara para construir una alternativa obrera y socialista y luchar por un gobierno de traba­jadores. Que se vaya el FMI: inde­seables son ellos, indeseables son los patrones, los capitalistas y los banqueros. (Aplausos.)


Compañeros, hay que tener presente que dos años atrás se pro­dujo en el gobierno de Montevideo -del Frente Amplio, de la centroiz­quierda-, un ataque contra los tra­bajadores desconociendo el conve­nio colectivo de los municipales. Y los trabajadores municipales fue­ron a una huelga, establecieron pi­quetes para impedir que los carne­ros entraran a trabajar, y frente a esto, no sólo les mandaron la poli­cía para intentar quebrar los pi­quetes, sino que varios de esos compañeros piqueteros estuvieron presos también, enviados a la cár­cel por los dirigentes del Frente Amplio. Entonces, esta campaña antipiquetera ya tiene anteceden­tes en Uruguay, y los principales impulsores de esta campaña son los propios dirigentes del FA o En­cuentro Progresista, como se llama ahora.


Y este problema de qué son es­te tipo de frentes como el FA, es al­go que tenemos que discutir todos los trabajadores. Porque tenemos aquí en Argentina fuerzas que es­tán en el movimiento piquetero y en la izquierda, que quieren hacer un Frente Amplio. Por ejemplo, los compañeros de distintos sectores piqueteros y de Izquierda Unida plantean hacer en la Argentina un Frente Amplio. Entonces, compa­ñeros, para saber lo que es el Fren­te Amplio podemos ver por ejemplo quiénes lo apoyan en la Argentina. Acá tenemos que aplicar ese dicho que dice “dime con quién andas y te diré quién eres”. Y acá en Ar­gentina apoyan al FA y a Tabaré Vázquez y a Astori el gobierno de Kirchner y de Lavagna, lo apoyan la Carrió, Aníbal Ibarra, lo apoyan D’Elía y Ceballos, y también lo apoyan sectores de izquierda, que no lo dicen abiertamente pero que están de hecho en un frente políti­co con esta gente. ¿Y cómo se man­tiene unido un frente político de Kirchner, Lavagna, la Carrió, D’Elía, Ibarra y todos los demás? A tra­vés de un fraude político que exis­te en Uruguay, que se llama ley de lemas y que permite que una can­tidad de partidos, candidatos, carreristas, todos juntos vayan en distintas listas pero sumando vo­tos unos con otros, como aquí pasa en algunas provincias. Y esto, com­pañeros, es una estafa que ha per­mitido la existencia de este frente electoral que se llama Frente Am­plio. Entonces, cuando aquí hay compañeros como Izquierda Unida que proponen hacer un Frente Am­plio, están proponiendo hacer una gran unidad que vaya desde Kirch­ner hasta Patricio Echegaray. En­tonces, compañeros, veamos un ejemplo: se habla de que quieren votar a candidatos de izquierda del Partido Comunista de Uruguay o de grupos radicales, como les dicen, para que entren al Parlamento. Y esos votos van a terminar llevando a senador al presidente de la Fe­deración Rural, es decir, a un te­rrateniente, a mi latifundista y a un oligarca, y no a un trabajador. Entonces terminan votando para meter a un trabajador de diputado y terminan eligiendo a un terrate­niente, a un latifundista como se­nador. Eso es hoy el Frente Amplio de Uruguay.


Entonces, compañeros, no hay que engañarse: eso no expresa una unidad de izquierda. Expresa, al revés, un proceso de fragmentación cada vez mayor: hay más de 200 listas en el Frente Amplio, todas ellas suman votos pero cada vez se dividen más. Eso no plantea nin­guna salida, no va a ningún lado, van a un fracaso como fue De la Rúa. ¿Quieren saber lo que es el FA? Es como la Alianza de Argen­tina, por eso lo apoyan todos esos sectores que vienen del radicalis­mo, del Frepaso y de la Alianza. Esa es la expresión concreta de lo que es el FA.


Entonces, en Uruguay tam­bién tenemos la necesidad de construir una alternativa obrera y socialista. El Partido de los Tra­bajadores interviene en la elección precisamente para agitar y propagandizar esa idea. Los trabajado­res en Uruguay también van a vi­vir la experiencia de un gobierno como el de Lula, un gobierno al servicio de los capitalistas y los banqueros, un gobierno que va a aplicar la política no sólo del pago de la deuda y de privatizaciones, sino también de ataque al movi­miento obrero, de quita de con­quistas. Prometen, por ejemplo, eliminar la estabilidad de los fun­cionarios públicos, prometen por ejemplo establecer planes de em­pleo peores que los planes Traba­jar de la Argentina, exigiendo una contraprestación laboral; prome­ten tirar abajo el seguro desempleo; es decir, terminar de una vez por todas con una serie de conquistas históricas de la clase obrera uruguaya.


Por lo tanto, compañeros, para nosotros es fundamental interve­nir en esta campaña electoral preparando las etapas futuras. La cla­se obrera va a vivir una experien­cia fundamental con este gobierno centroizquierdista sometido a la banca imperialista y, en este pro­ceso, van a haber grandes luchas, grandes confrontaciones de clase.


Los trabajadores tenemos que poner en pie, en todo ese proceso de luchas, un polo piquetero; tenemos que poner en pie una alternativa obrera y socialista también en Uru­guay. Y por eso estamos aquí pre­sentes, diciendo: arriba la cons­trucción de una alternativa obrera y socialista en Argentina, en Uru­guay, en Brasil, en toda América Latina y en todo el mundo. Porque la clase obrera es la que puede abrir una salida a la debacle y a la catástrofe en que nos colocaron los gobiernos capitalistas, al saqueo de nuestros salarios y nuestras con­quistas y al hambre de los chicos. A través de la toma del poder y de la reorganización de la economía por la clase obrera en términos so­cialistas.


Compañeros: el PT de Uruguay se compromete frente a todos uste­des, a que vamos a desenvolver una lucha por desarrollar el movimien­to piquetero y una alternativa obrera y socialista también en nuestro país. Estamos en una cam­paña y vamos a seguir a fondo re­clamando de todos los sindicatos del Uruguay, de todos los partidos del Uruguay, un pronunciamiento expreso por la libertad de todos los compañeros piqueteros de la Ar­gentina, reclamando que salgan de la cárcel, y que sean encarcelados los asesinos de la Amia, los asesi­nos del Puente Pueyrredón, y que se termine la represión contra los trabajadores y los compañeros de­socupados.


Compañeros: la salida para nuestro país es para toda América Latina y está planteada sobre la unidad de la lucha de todos los tra­bajadores, de todos los sectores ex­plotados que están levantándose en muchos países del continente. Las alternativas de centroizquier­da son el mecanismo que tiene el imperialismo para seguir domi­nándonos; frente al fracaso y a la catástrofe de los Menem, nos traen a los Kirchner, a los Lula, y a los Tabaré Vázquez. Los trabajadores tenemos que poner en pie nuestra fuerza, una alternativa obrera y so­cialista, y en esa lucha vamos hacia la victoria, a luchar por un go­bierno obrero.


¡Arriba los que luchan, viva la clase obrera!