Partido

24/6/1987|187

Comisión Neuquén

"Abajo el Paraíso de la superexplotación capitalista" "Adelante con el Frente de Trabajadores"

Después de la derrota electoral de 1985, el sapagismo vuelve a presentarse como la variante burguesa en la que se concentra el apoyo del gran capital. El multimillonario desembolso de fondos en la campaña electoral define a esta fuerza como lo que hegemoniza la salida burguesa.

El sapagismo ha Intervenido en el desarrollo de las restantes fuerzas políticas: promoviendo la fractura del peronismo renovador (acto del 17 de Octubre) e interviniendo en las internas del radicalismo (afiliados del MPN que participaron en las internas radicales); el correlato de este monopolio político es la presencia económica del clan Sapag en la explotación monopólica de los rubros fundamentales de la provincia (en la minería, en la construcción, es dueño de la cementera provincial por medio del directorio de Hidronor, participa del control de obras hidroeléctricas; manejo de la totalidad de los créditos hipotecarios y de la banca provincial).

El eje de la campana electoral del sapagismo (la construcción de viviendas, escuelas, obras publicasen general) incapacita a sus adversarlos políticos (UCR, PJ). Lógicamente que todo este plan de obras públicas reposa sobre una relación privilegiada del gobierno provincial con la Nación en lo concerniente a cupos de viviendas para el FONAVI y regalías petroleras. En este cuadro no llama la atención que el radicalismo realice una campana de pocos recursos sin ningún eje diferenciador con respecto a la política de Sapag con el cual ha armado ún acuerdo político nacional.

La tercera fuerza política provincial: el peronismo, viene de sufrir una fractura que dio origen a la JDP, la cual apareció como una variante renovadora “izquierdista" y que de inmediato sumó en un frente a la DC y al Pl. Pretendía aparecer ante los sectores explotados como la alternativa combativa, pero por el papel jugado por esta fuerza en la lucha de clases, avalando con su presencia en la “multipartidaria” toda la política oficialista en contra de los trabajadores, hoy está en una completa impasse. Como consecuencia de esto el otro sector del peronismo (Rachid) ha retomado fuerzas, interviniendo incluso en recientes elecciones sindicales, planteándose como objetivos la captura de direcciones sindicales (expresado esto en las tratativas realizadas por su candidato con Farías para lograr la intervención de la UOCRA).

En Neuquén la subordinación política de la izquierda se presenta en forma brutal, puesto que la Izquierda se suma cada vez que se presenta la oportunidad al bloque patronal contra los trabajadores. Es aún muy débil la presencia de elementos de esta izquierda que evolucionen hacia una ruptura con el frentismo democratizante, pero esta tendencia existe y va a desarrollarse como ya ocurre en todo el país.

En 1985, nació en Neuquén el Frente de Trabajadores en abierta oposición política al frente democratizante. Su programa señalaba las limitaciones insalvables del nacionalismo de contenido burgués y planteaba la independencia política de los trabajadores. Fue un avance político fundamental del proletariado. La lucha contra la Izquierda democratizante tomó un carácter abierto, y esta fue absolutamente derrotada en una gran asamblea obrera. En las elecciones de 1985 el Frente de Trabajadores superó el caudal de votos tradicional de la izquierda en la provincia, y cobró expresión en todas las localidades. Desde las elecciones de 1985 en adelante se fortaleció la tendencia política independiente en el seno de los trabajadores y de sus organizaciones, como se ha expresado en el desarrollo de las agrupaciones clasistas en docentes y estatales. La reciente huelga general de la UOCRA. aun derrotada por la política de la dirección sindical y de la izquierda democratizante, fue una muestra de la enorme voluntad de lucha revolucionaria de los trabajadores. Las filas del P.O. se reforzaron como consecuencia de la huelga. Las "multisectoriales" de la patronal y de la izquierda fueron desenmascaradas. El alineamiento de Selesky con la política de derrota demuestra que no hay alternativa combativa y luchadora fuera del Frente de Trabajadores. La rápida desmoralización de la JDP. con el pasaje de su principal burócrata sindical (Panetta) al frente con la burocracia repodrida (Bettancourt). es un testimonio (éste por la negativa) de la vigencia política del F.T.

El Frente de Trabajadores constituye una extraordinaria etapa política en la evolución revolucionaria del activismo obrero y de la izquierda. Es el marco político del frente revolucionario antimperialista que frecuentemente se da en los periodos de gran lucha nacional y de dirección de la clase obrera.

El P.O. de Neuquén llama a reforzar el Frente de Trabajadores con las conclusiones de las luchas políticas y sindicales de estos dos años y a reforzar las filas del F. de T. a todos los que comprenden que el frente democratizante confirmó en la práctica la tesis del P.O. de que ese frente concluiría como contrarrevolucionario (‘actas democráticas") y desmoralizador.

El P.O. denuncia las consignas "provincialistas" de todos los partidos patronales y de izquierda de Neuquén, como una tentativa de convertirla en “paraíso" de la irrefrenable explotación imperialista y nacional. Todos los pulpos impulsan esta posición, para colocar integralmente a su servicio al Estado provincial y "proteger" sus inversiones de las grandes crisis políticas nacionales. El P.O denuncia las consignas del provincialismo proimperialista y plantea la expropiación de todos los monopolios capitalistas de la provincia y su funcionamiento bajo el control obrero. La tribuna parlamentaria debe ser usada en su único sentido positivo para la nación y el pueblo: denuncia de la entrega y la corruptela capitalista y de la superexplotación de los trabajadores.