Partido

1/9/2005|915

CORDOBA – MST | La "familia policial"

A pesar de la proclama de los titulares de sus respectivos periódicos, la izquierda dio la espalda a la constitución de un frente para las elecciones. En Córdoba dio la espalda a un proceso que los estudiantes secundarios y los trabajadores de la ex Clínica Junín llevaron adelante para concretar el frente.

La asamblea autoconvocada por el frente de izquierda que se desarrolló el sábado 20, contó con la presencia de numerosos estudiantes, docentes y no docentes que estaban metidos en la lucha universitaria. La asamblea votó apoyar la propuesta del PO expresada en la carta abierta al MST y decidió que luego del martes 23 se sumaría a la campaña de quienes expresen la política establecida en esa carta. La izquierda no estuvo en esta asamblea.

En la mesa redonda convocada por los compañeros de la Clínica Junín, el MST había sostenido la importancia de que el frente fuera homogéneo a escala nacional, pero en Córdoba han hecho un frente con el PC, en Mendoza con el PS, en Buenos Aires con Cafiero; hay un frente para cada gusto.

La pregunta de los activistas es ¿por qué no hay un frente de izquierda? Un compañero de la Junín reflexionaba en una charla personal que si se hubiera hecho el frente el martes, ¿qué habría pasado el jueves? Se refería a que el jueves Izquierda Unida, más precisamente el MST, llamó a la “marcha de las gorras”, convocada por una asociación civil en defensa de la “familia policial”. El objetivo de la marcha era ser recibidos por el jefe de Policía para comprobar si era cierto que la nueva conducción era de “puertas abiertas”; además buscaban la “democratización, desmilitarización y humanización de la policía”. La movilización de 50 familiares, policías retirados y militantes del MST, reclamó tener injerencia en el reparto de 1.500 viviendas que fueron parte del acuerdo para levantar el conflicto.

Luego de ser mandados a la oficina de asunto sociales de la “fuerza”, los manifestantes se retiraron más que satisfechos porque, según reveló el vocero del grupo, el cabo Cisneros (un puntero del juecismo), comprobaron que el actual jefe de Policía “es un hombre muy democrático” (La Voz del Interior, 26/8).

El compañero de la Junín se acerca a la conclusión que corresponde: no hay frente de izquierda porque la política de IU cada vez vira más hacia la derecha: defensa de la “familia policial”, candidatos clericales como Cafiero, frente con la patria sojera en el Encuentro de Rosario.

E.S.