El Partido Obrero de Chaco realizó un plenario para largar la campaña electoral. El plenario estuvo precedido de una conferencia de prensa con la presencia de Aurelio Díaz, candidato a diputado provincial, quien enfatizó el rol que tendría una bancada que defienda los intereses populares en la provincia. Aurelio hizo especial énfasis en la denuncia del trabajo en negro por parte del Estado.

Nuestra campaña estará atravesada por la movilización popular frente al ajuste de Capitanich. Los estatales acamparon frente a la Casa de Gobierno por el pase a planta. La huelga docente se extiende en todo el interior luego de la represión, que generó una fuerte movilización popular de repudio. El plenario destacó un balance de la gestión de Capitanich, que no ha resuelto ninguno de los problemas históricos de la provincia. Se desarrolla con más fuerza que nunca la expulsión de campesinos e indígenas, de la mano del copamiento sojero de la tierra chaqueña. No se ha resuelto el acceso al agua potable para media provincia, donde el dengue sigue siendo endémico. La crisis de la vivienda es un verdadero polvorín, como se demuestra en las ocupaciones de tierras en Fontana y otros barrios de los alrededores de Resistencia. El desmantelamiento de los frigoríficos de la provincia es un capítulo aparte. El Toba fue reabierto, a cargo de la Fiduciaria del Chaco (con participación estatal). Sin embargo, faena sólo para el mercado interno y a un cuarto de su capacidad. Los trabajadores fueron reincorporados sin antigüedad y perdiendo importantes conquistas, y todos los activistas y muchos obreros fueron directamente despedidos, incumpliéndose todos los compromisos de reincorporarlos.

Pero si este es el balance de la gestión de Capitanich, no es diferente el de la oposición. La UCR/FAP han hecho un acuerdo electoral. Se trata de los mismos que gobernaron con el ajuste y la represión con Rozas y Nikkisch, y que ahora llevan adelante un ajuste con tarifazos e impuestazos en los distritos que gobiernan (para empezar, Resistencia). Nuestra campaña llamará a desarrollar una alternativa política que defienda los reclamos populares. El primer punto es una fuerte campaña de apoyo a las luchas populares de Chaco, sacando una conclusión: no va a ser ni de la mano del gobierno, ni de la oposición que ajusta en sus distritos, que los reclamos populares van a tener una respuesta. Es necesario desarrollar una alternativa política de izquierda en la provincia.

En la primera etapa de la campaña, promoveremos reuniones abiertas en cada una de las barriadas, en la universidad y con trabajadores en lucha, para debatir el programa y los planteos del Partido Obrero. El plenario discutió avanzar en organizar núcleos de apoyo en Tirol, Barranqueras y Fontana. Con esta disposición militante, vamos a abordar el objetivo de superar la traba de las internas, que exige llegar al piso del 1,5 por ciento en las internas.