El FUT obtuvo el 5,46% de los votos, más que triplicando la elección de 1999.

La nota destacada la dimos en Caleta Olivia, en donde obtuvimos 1.533 votos y el 9,5% para la candidatura de Omar Latini como diputado nacional.

En la cuenca carbonífera obtuvimos nuestro mejor resultado histórico: entre el 6,5% y el 7% en las dos localidades.

En Río Gallegos, en tanto, en la mejor categoría lográbamos el 6,25%.

La campaña ha servido como un ariete para el desarrollo del partido en el interior. En varias localidades se han sentado las bases de organización de las simpatizantes.

Se repartieron 30.000 cartillas electorales con importante concentración sobre los barrios, colocamos propaganda gratuita en revistas locales, radios de FM y canales de televisión.

Los votos de Kirchner son como los de Menem de 1995

Kirchner recuperó los elevados porcentajes que no lograba desde el ’95, como consecuencia del derrumbe de la Alianza.

Una parte de la población ve en Kirchner el garante de las actuales condiciones de vida y trabajo que, aunque precarias, aparecen menos deterioradas que en otros puntos del país. Es una ilusión, porque Kirchner va a atacar a fondo conquistas como el régimen jubilatorio, y sin duda va a descargar la crisis sobre la población trabajadora.

Desde una semana antes de las elecciones los mineros de Turbio han paralizado el yacimiento y un sector ha ocupado la mina.

El factor más dinámico, sin embargo, es la crisis nacional y la pelea por la defensa de los subsidios al gas, a las naftas y a la explotación carbonífera, que va a poner a Santa Cruz al rojo vivo, y a todas las fuerzas políticas a prueba. La campaña del FUT se desarrolló con este pronóstico y fue entendida por la militancia como una preparación para las jornadas decisivas que se avecinan.