Las elecciones municipales en Francia
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Los resultados y las posiciones de la izquierda
La pretensión de Nicolás Sarkozy de convertirse en el "Thatcher francés" duró diez meses. En su primera prueba electoral como presidente, las municipales realizadas el 9 de marzo, sufrió una neta derrota.
Los socialistas obtuvieron el 47% de los votos contra el 40% del partido de Sarkozy. Ganaron París, Lyon, Lille y Turcoing; en la segunda vuelta pueden ganar con Estrasburgo, Toulouse y hasta Marsella, un histórico bastión de la derecha.
La derrota estaba tan cantada, que en la noche de las elecciones, los dirigentes del partido de Sarkozy "celebraban haberse salvado de una hecatombe" (Página/12, 10/3).
En la izquierda, el PCF logró mantener las intendencias que gobernaba e incluso recuperó algunas perdidas en las últimas elecciones.
La Liga Comunista Revolucionaria (LCR) presentó 200 listas; más de la mitad superó el 5% de los votos; de ellas, 29 superaron el 10%. Sus mejores resultados, en ciudades medianas, llegaron al 15%. Así, la LCR logró más que duplicar el número de consejeros electos (pasó de 30 a 70).
Según los dirigentes de la LCR, los resultados "validan su estrategia de independencia frente al PS" y "vienen en apoyo de su estrategia de construir un nuevo partido anticapitalista". Entre una afirmación y otra hay una contradicción. Lo que mostraron los votantes es que la LCR tiene un campo de desarrollo. El "nuevo partido" que impulsa la dirección de la LCR ("partido-movimiento) es un planteo confusionista que busca sus potenciales aliados en el ala izquierda del reformismo y abandonó el terreno del socialismo revolucionario.
Para la segunda vuelta, la LCR plantea establecer "fusiones técnicas" de sus listas con las del PS o el PC "sin solidaridad de gobierno"; en Marsella, llama a votar al candidato del PS para "derrotar a la derecha".
La organización trotskista Lutte Ouvrière (LO) logró mantener la treintena de consejeros electorales que tenía. La "novedad" es que, esta vez, la mayoría de esos consejeros (21 sobre 36) fueron electos en listas comunes con el PS, con el PC o con ambos. LO rechazó la oferta de la LCR de presentar listas comunes en todo el país y dejó en claro que está dispuesta a aceptar responsabilidades de gobierno en los ejecutivos municipales junto a los socialistas y los comunistas. El sectarismo conservador abrió paso al conservadorismo oportunista.
