En el día de la fecha, en las primeras horas de la mañana, los trabajadores de Artico SA fueron impedidos de ingresar a su trabajo. Esta empresa desacató así la conciliación obligatoria de oficio dictada por la delegación del Ministerio de Trabajo, en respuesta a los despidos sin causa de 10 obreros, el pasado martes 26/9.

Artico SA es una empresa que debió blanquear a su personal con el Convenio del ’75, a principos de 2003, luego de una durísima lucha, incluidas la huelga, ocupación de la planta, bloqueo de sus puertas y el enfrentamiento con la Guardia de Infantería. Hoy busca desembarazarse de su personal bajo convenio para retornar a la pérfida práctica negrera de las "coopetruchas" y/o la del convenio de igual cuño Cipa-Soip. Tal como lo expresa, el apoderado legal de la firma, el ex juez de la dictadura Dr. Rivera, directivo de la cámara industrial (Cipa) con la complicidad de la aún más ilegal "Comisión Directiva" del Soip.

Como si esto fuera poco, ante la protesta que se produjo en la puerta de la empresa, con la adhesión de otros trabajadores de la industria y de organizaciones populares, se produjo una movilización policial que incluyó mi propia detención (y el secuestro del vehículo en el que me desplazaba). Ante estos hechos, denuncio a la Cámara de Industriales de la Pesca y al gobierno de Solá-Kirchner: mientras la actividad bate récords de exportación en cantidad y precio, aquellos garantizan el trabajo en negro de más de 8.000 obreros de esta industria, con el declarado objetivo de imponer la liquidación, en los escasos establecimientos donde hoy rige, de las conquistas contenidas en el convenio colectivo del año ‘75 (la jornada de 8 horas, la garantía horaria, la estabilidad, la sustentabilidad de la materia prima, etc.).

Doblemente responsables son Solá y Kirchner, por el sistemático empleo de las fuerzas de "seguridad" y de la "Justicia", contra los intereses, derechos y libertades de los trabajadores, y en defensa de sus verdaderos "mandantes", los empresarios de la Pesca. De paso esto deja en claro que la mentada Mesa de Consenso montada por el Gobierno, con la participación de entidades empresarias y sindicales, y con el objetivo de "normalizar la actividad", "en el marco de la paz social", es una cortina de humo para tapar sus auténticos objetivos flexibilizadores y antiobreros. Los trabajadores de Artico deben ser reincorporados sin más dilación.

Alejandro Martínez (3/10)