Después de varios meses de controversias judiciales, el dirigente municipal Patricio Datarmini renunció a la presidencia de la Obra Social de la Ciudad (Obsba). De ese modo posibilitó que Jorge Rey, interventor designado por Macri, asuma el control pleno de Obsba. En el "currículo" de Rey, se destaca su experiencia como gerente de las empresas de Macri. El "grupo" Macri controla accionariamente el Hospital Italiano, uno de las grandes prestadoras de obras sociales desreguladas en la Capital. Por lo visto, en la intervención de ObSBA los "intereses particulares" están a la orden del día.

Para esto el gobierno intervino las cuentas de Obsba en el Banco Ciudad, de modo que "no iban a poder usar el dinero de la obra social para pagar a proveedores" (Clarín, 15/3). Ante la extorsión, Datarmini prefirió ceder cuando podía "denunciar penalmente a Rey" (ídem). Sutecba, de todos modos, participará de la intervención a través de "una comisión de seguimiento" (idem).

La renuncia de Datarmini termina de sellar el pacto entre los "gordos" y el macrismo para desregular la obra social, o sea, tercerizar más de 200.000 cápitas en favor de prestadoras privadas.

Marcelo Ramal