Por primera vez en 18 años, los trabajadores del hospital realizamos un paro. Fue de dos horas por turno durante dos días consecutivos por un aumento real de los salarios, intentando superar un acuerdo de la dirección de Atsa Buenos Aires que tras 15 años logró un aumento de 200 pesos con absorción de adicionales no convenidos que nos deja lejos de lo que necesita una familia para vivir. Se realizó con masivas concentraciones en el hall del hospital que molestaron profundamente a una patronal muy preocupada por su imagen. Se superaron intentos de división, amenazas verbales de despido, la presencia de escribanos que detrás de la excusa de verificar el cumplimiento de las guardias (que se realizaron con organización ejemplar) buscaban amedrentar a los trabajadores; y finalmente el envío de cientos de telegramas con intimación de despido.

Los trabajadores del hospital hemos quedado más unidos y fortalecidos que nunca para continuar esta lucha con el fin lograr un salario que nos aproxime a la canasta familiar. El método de las asambleas generales donde todos debatimos y finalmente resolvemos, ha permitido este avance ejemplar que ha dejado atrás aquello de “en el Británico no se puede cambiar nada” y en donde sectores claves que jamás se movían pasaron a jugar un rol protagónico: enfermería y cirugía fueron los más presionados y luego los más firmes.

Manteniendo esta unidad y firmeza, estamos condenados a lograr lo que reclamamos.

Edgardo Tyntenfisz