Vecinos y trabajadores de Ciudad Oculta pro­tagonizaron una importante movilización del ba­rrio para terminar con la oleada de robos y agresio­nes que reciben los vecinos por parte de “barras” que se mueven impunemente, tanto en la Villa como en el barrio Lugano. Los manifestantes se pronunciaron también contra el accionar indiscri­minado de la policía, subrayando el rechazo a cualquier intento de “utilizar” estos reclamos para montar “razzias” policiales en la barriada.

Prensa Obrera recogió las siguientes opiniones en la movilización.

PO: ¿Qué motiva esta movilización?

Pecho: “Queremos terminar con los atrope­llos, asaltos y robos a mano armada perpe­trados por una ultraminoría del barrio, diez o doce personajes. No queremos más atrope­llos, ni dentro ni fuera del barrio. Que quede claro que no queremos que esto sea aprove­chado para montar una razzia que termina siendo contra la gente, no nos sirve…”.

Una ama de casa declaró a PO: “Es una ma­nifestación para pararles la mano a los que molestan al barrio. Pero ojo, porque las ra­zzias terminan intimidando a trabajadores y comerciantes y no a los sinvergüenzas. Además, hace creer a la población que somos todos cómplices”.

Carlos opinó: “La movilización es contra la situación de inseguridad que vivimos a cau­sa de un grupo de provocadores, pero tam­bién contra cualquier razzia que se esté ges­tando con la excusa de los robos. Porque hay conciencia de que las razzias terminan por joder a la gente. La solución es terminar con la discriminación social”.

Carlos Alberto agrega: “Hay que ayudar a estos muchachos para que no sigan el cami­no de la droga, hay que rehabilitarlos, son el producto de la discriminación, la moviliza­ción es el camino para encontrar una solu­ción”.

Esta movilización de los vecinos de Ciudad Oculta es un primer paso de auto-organización de los vecinos. Hace un par de años, ante hechos similares, los vecinos organizados obligaron a un grupo de delincuentes a abandonar el barrio.