Justicia para Yiyi

María Esther Herrera es la abuela de Emanuel “Yiyi” Mollo Guerra, el pibe de 17 años asesinado el 7 de diciembre de 2003 en la comisaría del menor de Villa Bosch. Ella estuvo en Hurlingham, en la marcha de la fría noche del viernes 28, y habló con Prensa Obrera para relatar la causa de su lucha.


“Por un hurto, mi nieto estuvo en las comisarías de Los Polvorines y Villa Lynch, donde fue golpeado… Después pidió que lo pasaran a Villa Bosch, donde enseguida lo castigaron poniéndolo en un ‘buzón’; y el 5 de diciembre, cuando lo visité, me contó que estaba arrepentido de estar ahí porque le pegaban hasta con matafuegos”.


–¿Cómo lo mataron?


–Los policías me contaron que los chicos habían prendido fuego en la comisaría y que mi nieto se había asfixiado. Pero el fuego se prendió afuera, en el pasillo. Cuando me entregaron el cuerpo, descubrimos que tenía las cuatro falanges de la mano cortadas; acariciándolo, me di cuenta que lo habían maquillado para que no le viéramos los golpes, porque tenía el lado derecho de la sien hundido, y moretones, y lastimaduras en la cara.


–¿Lo mataron los policías de Villa Bosch?


–Me lo mataron a golpes o lo dejaron inconciente, los policías se asustaron, prendieron fuego en la comisaría y trataron de ocultar todo. Además, ese día en la comisaría había un funcionario de la municipalidad de Curto (intendente de Tres de Febrero): lo llamaron ellos para tapar todo.