Políticas
2/5/2024
1° de mayo en Rosario de los sindicatos en lucha, los piqueteros y la izquierda
Por la derrota de Milei y los gobernadores.
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1 de mayo en Rosario.
Este 1° de mayo fue una gran jornada de lucha en Rosario. Con una marcha y un acto frente a la Bolsa de Comercio con una unidad entre sindicatos, organizaciones sociales y la izquierda; participaron Amsafe Rosario, Federación Aceitera Rosario, ATE Rosario, CTA-A, Partido Obrero y Polo Obrero, Siprus, Coad, FOL, Libres del Sur, MST, CCC, Asambleas Populares, entre otras. La columna del PO se destacó por su masividad y su carácter combativo, los cánticos de “A Milei hay que echar con la huelga general” fueron acompañados por muchos de los participantes.
En el acto se leyó un documento consensuado (ver abajo texto completo), que tuvo importantes definiciones, con la consigna: “La lucha continua para derrotar el ajuste de Milei y los gobernadores”. El llamado a organizar “la huelga general para derrotar a Milei”, en oposición “a las trenzas parlamentarias” y a “organizar asambleas, plenarios, por un plan de lucha”, en oposición a la tregua CGT, son unos de sus puntos más importantes.
Al respecto se leyó: “Nada podemos esperar de la trenza parlamentaria, de los gobernadores que aplican el ajuste, ni de los sectores del peronismo que dicen que hay que esperar hasta las próximas elecciones. Hoy estamos sufriendo un ajuste que es brutal. No nos dan tregua y no podemos esperar. Nos tenemos que unir todos los trabajadores para abrirnos un camino propio. Rodeando con solidaridad las luchas en curso y preparando la pelea en los lugares de trabajo, de estudio y en los barrios. El paro nacional convocado por las centrales obreras para el 9 de mayo debe ser el inicio de un plan de lucha. Llamamos a impulsar en los distintos gremios, asambleas y plenarios para reclamar a las centrales sindicales un plan de lucha con movilizaciones y piquetes en el camino de la huelga general para derrotar con la fuerza de la clase trabajadora y el pueblo movilizado el ajuste de Milei, Caputo y Bullrich”.
La única intervención estuvo en boca de los aceiteros, que venían de realizar un paro de 24 horas contra la reforma laboral y la reinstalación del impuesto al salario, con piquetes en la puerta de varias importantes plantas aceiteras. Marcos Pozzi dijo “que nos sentimos solos, no nos acompañó la CGT. Hay que dejar de reclamarle a la CGT y organizar el paro nosotros por abajo”. Una importante definición de un sindicato estratégico en la Argentina.
El documento también reivindicó la lucha del pueblo palestino y destinó una dura crítica a la masacre perpetrada por el Estado de Israel; así como “la lucha por terminar con toda forma de explotación y opresión, por la emancipación de la clase trabajadora mundial”.
Acto obrero y socialista
Una vez terminado el acto unitario, el PO movilizó desde la Bolsa de Comercio hasta Plaza Pringles, donde tomó la palabra nuestra compañera Carla Deiana. Allí denunciamos que el gobierno minoritario de Milei se sostiene gracias a la complicidad de los bloques políticos de los que nos gobernaron las últimas décadas, así como de la burocracia sindical, que entrega derechos colectivos a cambio de sus cajas. Llamó a organizar desde abajo el paro del 9 de mayo, con una profunda campaña por la huelga general hasta derrotar a Milei.
Señaló el carácter socialista e internacionalista de la jornada, “desde la juventud universitaria reprimida por Biden por defender al pueblo palestino, hasta la lucha de los piqueteros por terminar con un gobierno de guerra contra los trabajadores, somos parte de 200 años de lucha de un movimiento obrero y socialista que nace y renace a pesar de la censura, la persecución y la represión, contra un régimen capitalista en decadencia”. “Llamo a levantar las banderas de la revolución social y del socialismo para terminar con la explotación del hombre por el hombre”, dijo Carla.
DOCUMENTO CONSENSUADO
1° de Mayo: día Internacional de los Trabajadores
La lucha continua para derrotar el ajuste de Milei y los gobernadores
Hoy, en este nuevo 1° de Mayo, lxs trabajadores de Rosario y la región volvemos a levantar una tribuna de lucha como lo hicimos en aquella jornada inicial, en aquel histórico 1° de mayo de 1890.
Ese 1° de mayo en donde por primera vez la clase obrera de los más diversos países del mundo se unió en el reclamo de la jornada de 8 horas y en el recuerdo y la reivindicación de la lucha de los mártires de Chicago.
En los tiempos de la última dictadura los trabajadores y trabajadoras de nuestra región tomaron esta fecha del 1° de mayo para encontrarse y fortalecer la resistencia con el régimen militar y sus políticas.
En años más recientes la fecha sirvió para levantar tribunas unitarias de apoyo a luchas en curso como fueron las de ICI en San Lorenzo o la de la metalúrgica Malhe en la zona oeste de Rosario.
Hoy volvemos a reivindicar nuestra condición de trabajadores y trabajadoras.
Integramos ese inmenso colectivo de miles de millones que en los cinco continentes garantizamos todo lo necesario para la reproducción de la vida de la humanidad.
Trabajadores y trabajadores de la industria y el comercio, docentes, médicas, enfermeros y de las más diversas profesiones. Con trabajo o desocupadas y desocupados, en actividad o jubilados, bajo convenio o precarizados, sindicalizados o de la economía populares, todos y todas somos parte de una clase que sufre un ataque constante a nuestras condiciones de trabajo y de vida.
En todo el mundo los grandes capitales imponen sus condiciones, maximizan sus ganancias y, de nuestro lado, entre los sectores populares lo que crece es la pobreza y el hambre.
En particular, en nuestro país, el ajuste de Milei y los gobernadores está significando un ataque brutal.
No resulta exagerado decir que nos ha declarado la guerra.
Debemos irnos casi a 50 años atrás, a comienzo de la dictadura de 1976 para encontrar un ataque de estas dimensiones.
Vienen por nuestros salarios y jubilaciones, vienen por nuestros puestos de trabajo, vienen por nuestros derechos laborales conquistados en más de 100 años de lucha, vienen por nuestras organizaciones obreras.
Vienen por la educación pública, por la salud pública, por nuestras universidades, por la ciencia y la técnica.
Vienen por nuestros bienes comunes, por la tierra, los ríos, las montañas y los humedales.
Vienen por la información pública, el cine, la televisión y toda expresión de nuestra cultura.
Vienen por nuestro derecho a la protesta.
Vienen por la memoria, la verdad y la justicia
Vienen por las empresas del Estado, las acciones del fondo de garantías del sistema jubilatorio y contra todo lo que exprese, de alguna manera, un rasgo de autonomía e independencia del poder económico.
La motosierra en marcha -y que nos anuncian como infinita- no va contra ninguna casta.
Todo lo contrario.
Motosierra y licuadora avanzan sobre nuestros puestos de trabajo sumando miles y miles de despidos en el Estado y en el sector privado.
Sobre los salarios, las jubilaciones, los programas sociales, los subsidios y las asignaciones familiares que están teniendo una caída brutal frente a una inflación que no da tregua.
Sobre los comedores y merenderos que vienen garantizando un plato de comida para millones de desamparadxs en nuestros barrios populares y que no reciben ni un kilo de alimentos.
Sobre la salud, la educación y la universidad pública.
Sobre las cajas jubilatorias y los derechos conquistados.
En esta política de ajuste brutal solo hay plata para los grandes capitalistas y empresarios amigos del poder, para el FMI y para el pago de la deuda externa.
La contracara de la fiesta de los bonistas y los bancos es la pobreza, la miseria y hasta el hambre creciendo a niveles históricos en un país rico que produce alimentos para cientos de millones de personas.
Pero justo es reconocer que los problemas de los sectores populares no empezaron el 10 de diciembre. El triunfo de Milei en las elecciones presidenciales es la expresión clara del hartazgo de millones de argentinos con sucesivos gobiernos de distintos signos políticos que no dieron respuestas fundamentales. A 40 años de diciembre del ’83 lo que quedó claro fue el fracaso de la promesa de que “Con la democracia se come, se cura y se educa”. Por el contrario, lo que se impuso fue la continuidad, y en ocasiones hasta la profundización, de la “miseria planificada” de la dictadura que con tanta precisión denunciara Rodolfo Walsh.
La ofensiva no para, y luego de que se cayera la última ley ómnibus, el lunes dieron media sanción en diputados a una nueva versión que es una suma de ataques a derechos populares. Impone muchos puntos de la reforma laboral que significan retrocesos históricos, como la anulación de multas por trabajo no registrado, la extensión del período de prueba hasta 8 meses, la destrucción de las indemnizaciones, la contratación bajo la figura de “colaborador” y el retorno del impuesto al salario. Plantea importantes retrocesos en los derechos jubilatorios, rematando el fondo de garantía y sustentabilidad y privando de la moratoria previsional a millones de trabajadoras desconociendo el trabajo domestico. Permite el blanqueo de capitales para los que se fugaron las riquezas del país y, como si esto fuera poco, bajan impuestos a los más ricos y le otorga al presidente Milei facultades extraordinarias.
Con toda firmeza desde este acto rechazamos la reforma laboral que viene a arrasar con conquistas históricas de la clase obrera argentina y decimos que no existe ninguna reforma laboral “moderada” que beneficie a los trabajadores. Rechazamos la actitud de la cúpula de la CGT de negociar esta reforma a espalda de los sindicatos y sus bases. Buscan avanzar sobre los convenios colectivos y sobre las indemnizaciones, aumentar la edad jubilatoria y cercenar el derecho de huelga en varias ramas de actividad. También rechazamos las paritarias a la baja que firman algunos sindicatos.
Este plan de guerra de Milei, que solo cuenta con pequeñas minorías en ambas cámaras y no posee ningún gobernador propio, solo puede avanzar con la complicidad de buena parte del arco político.
Los gobernadores aplican el ajuste en sus provincias y negocian en el Congreso pactos parlamentarios para salvar las finanzas provinciales a costa de nuevos golpes contra el pueblo trabajador como es la vuelta del impuesto al salario.
En Santa Fe, el gobierno de Pullaro avanza en la misma línea y le dio los votos al gobierno nacional para aprobar la ley ómnibus.
La caída del salario y las jubilaciones, el desconocimiento de la paritaria 2023, la ley que busca recortar nuestros derechos previsionales y el intento por imponer el presentismo a la docencia son expresiones claras de la completa sintonía con las políticas del gobierno nacional.
Pullaro y su ministro Goity hacen demagogia con defender la universidad pública, pero en nuestra provincia siguen recortando el presupuesto para educación y atacando a los docentes.
Rechazamos que tengamos docentes, profesionales y trabajadores estatales pobres en una provincia rica.
Rechazamos que los sectores más concentrados de la economía provincial y todo el complejo agroexportador sigan acumulando ganancias mientras las escuelas se caen a pedazos y nos cortan la atención del IAPOS.
Mientras tanto continúa la crisis de inseguridad. Pullaro y Bullrich vuelven a aplicar las políticas de militarización de los barrios que ya fracasaron en muchas oportunidades. Pero el circuito capitalista del negocio narco sigue en pie, con los puertos privatizados y también la vía navegable del Paraná. Denunciamos la complicidad de sectores de la policía y de los poderes político, judicial, económico y financiero con las bandas narco. Reivindicamos los paros y todas las medidas de fuerza llevadas adelante por los sindicatos frente a olas de ataques y de asesinatos a los trabajadores, exigiendo otras respuestas del Estado.
Desde este acto rechazamos la militarización de Rosario y la política de criminalización de la juventud. Reclamamos trabajo genuino, políticas de urbanización de los barrios populares, asistencia integral para los consumos problemáticos y más y mejores políticas culturales, de recreación, de salud y educativas en nuestros barrios.
En estos tiempos tan difíciles el pueblo trabajador argentino vuelve a mostrar que no está dispuesto a dejar que los pasen por arriba
Apenas asumido, el gobierno de Milei debió enfrentar las primeras acciones de resistencia.
La jornada del 20 de diciembre encontró a miles de manifestantes en la calle enfrentando el ajuste y derrotando el “protocolo antipiquetes” en Buenos, acá en Rosario y en otras ciudades del país.
Tambien en diciembre se hicieron oír con fuerza los primeros cacerolazos.
El movimiento piquetero no abandonó las calles y construyó grandes jornadas reclamando asistencia para los comedores, aumento de los planes sociales y trabajo genuino.
El paro del 24E convocado por la CGT y las dos CTA atravesó todo el país poniendo en el centro el protagonismo de la clase y sus organizaciones que paralizaron la actividad económica.
El 8M el movimiento de mujeres volvió a ocupar las calles con una masividad pocas veces vistas para frenar a un gobierno que pretende barrer con todas las conquistas logradas en las calles por las mujeres y las disidencias. En este acto nos pronunciamos en defensa del aborto legal, seguro y gratuito y reivindicamos la lucha contra toda violencia y discriminación por motivos de género. Ni un paso atrás!
Estos meses estuvieron atravesados por las luchas de los trabajadores estatales contra los despidos, en defensa de sus puestos de trabajo y también de todos y cada uno de los derechos que estos trabajadores y trabajadoras garantizan todos los días.
También por importantes luchas provinciales de docentes que atravesaron buena parte del territorio nacional.
Las calles y plazas de todo el país desbordaron de una multitud el último 24 de marzo. Miles y miles de personas reclamando por memoria, verdad y justicia. Rechazando el negacionismo del gobierno y hasta las políticas reivindicativas del genocidio de la vicepresidenta Victoria Villarruel y volviendo a gritar muy fuertes que son 30 mil y que reivindicamos la lucha y levantamos las banderas de nuestros compañeras y compañeros desaparecidos.
Y el pasado 23 de abril la resistencia dio un verdadero salto con más de un millón de personas en todo el país, estudiantes, docentes, jubilados, trabajadores de diversos gremios, desocupados y hasta familias enteras defendiendo la universidad y la escuela públicas.
El camino es seguir desarrollando la resistencia de nuestro pueblo. Nada podemos esperar de la trenza parlamentaria, de los gobernadores que aplican el ajuste, ni de los sectores del peronismo que dicen que hay que esperar hasta las próximas elecciones. Hoy estamos sufriendo un ajuste que es brutal. No nos dan tregua y no podemos esperar.
Nos tenemos que unir todos los trabajadores para abrirnos un camino propio. Rodeando con solidaridad las luchas en curso y preparando la pelea en los lugares de trabajo, de estudio y en los barrios.
El paro nacional convocado por las centrales obreras para el 9 de mayo debe ser el inicio de un plan de lucha. Llamamos a impulsar en los distintos gremios, asambleas y plenarios para reclamar a las centrales sindicales un plan de lucha con movilizaciones y piquetes en el camino de la huelga general para derrotar con la fuerza de la clase trabajadora y el pueblo movilizado el ajuste de Milei, Caputo Bullrich.
Para finalizar este acto del 1° de mayo llevamos nuestra mirada a Medio Oriente y nos solidarizamos con el pueblo palestino que está sufriendo un genocidio en manos del Estado de Israel. Genocidio que se llevó la vida de 35 mil palestinos, bombardeando escuelas y hospitales, provocando un verdadero infanticidio que está siendo repudiado con movilizaciones masivas en todo el mundo. Rechazamos el alineamiento del gobierno de Milei con el gobierno genocida de Israel y apoyamos la resistencia del pueblo palestino. La lucha contra el sionismo nada tiene que ver con el antisemitismo. Viva Palestina libre.
Repudiamos también, la completa subordinación del gobierno de Mieli al imperialismo norteamericano, con la visita de Richardson a Tierra del Fuego para instalar una base militar del imperialismo aliados a los ocupantes ingleses de las Islas Malvinas. Rechazamos este coloniaje y sostenemos que las Malvinas son argentinas.
En este día internacional de la clase trabajadora, seguimos levantando las históricas banderas de organización y lucha obrera en todo el mundo para acabar con este sistema de guerra, hambre y miseria avanzando hacia una transformación radical de la sociedad en favor de las mayorías populares.
-La lucha continua por derrotar el ajuste de Milei y los gobernadores. Paro Nacional y plan de lucha hasta la huelga general.
-No al DNU, no a la Ley Ómnibus..
-Ningún despido en el estado y en el sector privado. Basta de precarización. Pase a planta efectiva de todos los contratados.
-Abajo la reforma laboral. Basta de licuación de salarios, jubilaciones y planes sociales. -Aumentos ya para recuperar lo perdido por inflación. Cláusula de actualización automática.
-Por un plan integral de reactivación económica recuperando los recursos estratégicos del país. Nacionalización de los bancos, los puertos y el comercio exterior en manos de los trabajadores.
– No a las privatizaciones. No a la entrega del patrimonio nacional
– No a las políticas de saqueo. Defensa de nuestros bienes comunes.
-Investigación y no pago de la deuda externa. Fuera el FMI
-Abajo el protocolo represivo de Bullrich y Milei. Defendemos el derecho constitucional a la huelga y a la protesta.
-Luchamos por terminar con toda forma de opresión y explotación, y por la emancipación de la clase trabajadora.
-Viva el 1° de mayo
-Vivan las luchas de los sectores populares de la Argentina y de todo el mundo
-Viva la clase trabajadora internacional
Sindicato Aceiteros, ATE Rosario, Coad, Siprus, Sindicato Jaboneros, CTA A Rosario, Partido Obrero en el FIT-U, Polo Obrero, FOL, IS en el FIT-U, Libres del Sur, MST en el FIT-U, Opinión Socialista, Federación Anarquista de Rosario, Centro Social Cabin 9
