Después de su apoyo público al derogado decreto macrista 70/17, que disponía la expulsión sumarísima de extranjeros, el ministro de Seguridad bonaerense, Sergio Berni, volvió a pedir la baja de la edad de imputabilidad para los menores. Esta vez el escenario elegido fue un acto junto al intendente de Esteban Echeverría, Fernando Gray. Tratándose de Berni, el acto compartido con Gray -quien pretende encarnar a un sector del PJ que se opone al avance de La Cámpora en la provincia de Buenos Aires- trasciende la entrega de los “120 nuevos chalecos antibalas” a los efectivos policiales. En discusión están las aspiraciones de Berni de ingresar al Consejo del PJ bonaerense, y su lugar en las listas para las elecciones legislativas.

A las pintadas promocionando una eventual candidatura, y la apertura de locales partidarios “bernistas”, el ministro de “Seguridad” sumó en su momento un video de propaganda propio como jefe de la Bonaerense “en acción”, grabado después de la brutal represión en Guernica ordenada por el gobernador Axel Kicillof. En febrero de este 2021, Daniel Scioli elogió a Berni como el “mejor candidato a gobernador de la provincia”. Como político en campaña, Berni se presenta simultáneamente como integrante de la camarilla kirchnerista, y puente del gobierno provincial hacia el pejotismo, incluido el “rebelde” Gray que impugnó judicialmente la elección adelantada del PJ bonaerense.

En sus declaraciones en Esteban Echeverría, Sergio Berni insistió con una “nueva ley penal juvenil”, compitiendo a la derecha con Patricia “Chocobar” Bullrich para que se baje la imputabilidad a los menores a los 14 años de edad. El hombre fuerte del gabinete bonaerense invoca la “lentitud de la Justicia” para avanzar a paso redoblado con el Código Penal en la mano, para judicializar, criminalizar y perseguir a la juventud. Los datos desmienten a Berni y a Bullrich y a todos los derechistas repartidos en el Frente de Todos y en Juntos por el Cambio: los delitos cometidos por menores de 16 y 17 años en la provincia de Buenos Aires representan sólo un 3,2% de los cometidos por los adultos.

La persecución de los jóvenes en las barriadas, a manos de la “maldita policía”, es parte del reforzamiento represivo del Estado en tiempos de crisis capitalista y pandemia, ahora con la segunda ola en puerta. Es un instrumento para disciplinar e intimidar cuando la desocupación en la juventud es una bomba de tiempo, especialmente en el Conurbano bonaerense. En la provincia de Buenos Aires la tasa de desempleo juvenil es tres veces más alta que la del total de la Población Económicamente Activa (PEA), a lo que suma la precarización laboral extrema y el trabajo en negro. Toda una radiografía del fracaso de Kicillof y del kirchnerismo que se arroga la representación de la juventud.

Con esta agenda de “mano dura”, mimetizada con la oposición derechista, Sergio Berni despliega juego propio y aprovecha para volver a cuestionar a los “liberales” que se oponen a la “baja de la imputabilidad” dentro el gobierno nacional. Es otro tiro por elevación contra la ministra Sabina Frederic y por lo tanto contra los restos del gabinete de Alberto Fernández. Una vez más, Cristina Kirchner azuza al derechista Berni contra el “albertismo”, que se vio obligado a convalidar la candidatura de Máximo Kirchner al frente del PJ de la provincia de Buenos Aires como parte de la negociación para asumir la jefatura del Partido Justicialista a nivel nacional.

La arremetida de Berni contra los migrantes y contra la edad de imputabilidad a los menores coincide con la represión feroz a los trabajadores de Arrebeef y sus familias que luchan por los puestos de trabajo y el salario. Kicillof y su ministro desplegaron la infantería contra los obreros del frigorífico de la localidad de Pérez Millán, a cuenta de la patronal y de la burocracia sindical de la carne repudiada por su complicidad con la empresa. Es el pacto social a palos.

La movilización en este 24 de marzo está asociada directamente a la lucha contra la criminalización de la juventud, por Justicia para Facundo Astudillo Castro y castigo a los responsables de su asesinato, por el rechazo a la baja de la edad de imputabilidad y el desmantelamiento de la maldita policía bonaerense, en apoyo a las luchas populares en la provincia y en todo el país contra el ajuste del FMI y por la defensa de los derechos de organización y movilización de la clase obrera que enfrenta la ofensiva capitalista y del gobierno.

La consigna ¡Fuera Berni! pega de lleno contra el aparato represivo y los “nacionales y populares” que bancan al jefe de la Bonaerense y derechista confeso. La juventud debe estar en la primera línea de esta movilización.

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