Políticas

16/9/2015|1381

Abajo el desmantelamiento del Hospital De Wilde

(Tribuna de Salud), candidato a concejal de Avellaneda


El Hospital de Wilde pasó a depender de la administración provincial gracias al acuerdo de traspaso firmado entre Ferraresi y Scioli.


Durante todo este tiempo, Tribuna de Salud apoyó la heroica lucha de sus trabajadores contra la provincialización. Se trataba de resistir el traspaso de un hospital que, aún con sus falencias, funcionaba, a un sistema de salud provincial totalmente colapsado, vaciado y en su peor crisis.


La incansable lucha de los compañeros del Wilde y los vecinos por la defensa de sus puestos de trabajo y la calidad de la atención sanitaria en Avellaneda está en las antípodas de los intereses de los funcionarios que firmaron el traspaso. Junto a ellos se alinearon la mayoría de los bloques de concejales, tanto los ávidos por las migajas que les tocaba, como los que dijeron oponerse, pero observaron pasivamente este atropello. No han sido ajenos a esta usurpación las burocracias que dirigen Amra o Cicop, que se pronunciaron expresamente en contra de los trabajadores o del sindicato municipal que apenas declaró su solidaridad nominal para esconder su complicidad.


Al momento


A poco más de tres meses del traspaso, la incertidumbre reina: ninguna autoridad provincial ha aclarado cuál va a ser el destino del hospital dentro del sistema provincial. Al mismo tiempo, el desguace y vaciamiento del hospital se está haciendo realidad: cargos vacantes que no se cubren, retrasos e incertidumbre en el pago de los reemplazos de guardia, servicios o equipamientos como el Laboratorio o Radiología que no funcionan o lo hacen de modo intermitente. La falta de mantenimiento es evidente en los baños y el ascensor.


El cuadro se completa con “aprietes” a los trabajadores por parte de la nueva dirección del hospital con cambios de horarios y otras formas de hostigamiento.


Es un paso más en el déficit sanitario y la precariedad de la atención de los vecinos de Avellaneda. Lo mismo sucede en los otros tres hospitales de la localidad que se desangran con magros presupuestos, malas condiciones de trabajo y salarios. Para colmo, la atención primaria agoniza con unidades sanitarias destruidas y vaciadas de planteles e insumos y barriadas enteras afectadas por la contaminación, la pobreza y el hacinamiento.


Desde el Frente de Izquierda hacemos una defensa incondicional de la salud pública.


Vamos por una asamblea conjunta de todos los trabajadores del Wilde por un plan de lucha en defensa del hospital y las condiciones de trabajo. Por más presupuesto, mejores condiciones de trabajo y políticas integrales de salud bajo control de los trabajadores, en el camino hacia un sistema de salud estatal, único, universal y gratuito, centrado a nivel