El pasado sábado 15 de abril tuvo lugar un acto de la Agrupación de Trabajadores Peruanos (Atraper) en la entrada del Playón de Chacarita. Contó principalmente con la concurrencia de compañeros peruanos organizados en el Polo Obrero. También estuvieron presentes compañeros que vienen participando del movimiento de lucha en Buenos Aires contra el golpe y la represión, como es el caso de Autoconvocados y la Comisión por la libertad de Pedro Castillo.

El acto de Atraper tuvo como propósito el apoyo a la rebelión popular a la que vienen asistiendo los trabajadores de Perú en los últimos meses, planteando su vigencia y la necesidad de terminar con el gobierno golpista y represor, para que sea sustituido por una asamblea constituyente libre y soberana. La convocatoria fue preparada con una invitación puerta por puerta en el barrio, que tiene una porción mayoritaria de comunidad peruana.

El informe inicial estuvo a cargo de Rafael Santos, dirigente del Partido Obrero, quien explicó la continuidad de la rebelión popular en Perú, y, en esa perspectiva, señaló el paro que se preparaba para el martes 18 en el norte del Perú, que hasta ahora se había movilizado poco contra el gobierno golpista. Si bien de conjunto la movilización callejera se vio menguada, sus motivaciones no han sido resueltas y se expresan en un profundo rechazo popular tanto del Congreso reaccionario como del gobierno títere de Dina Boluarte. Es la expresión del agotamiento de un régimen de saqueo capitalista del país y de una profunda explotación de sus trabajadores.

Cuando se abrió la palabra a una radio abierta quedaron planteados algunos debates. Uno de ellos acerca de si el movimiento tiene que pelear por la restitución de Pedro Castillo. Desde la agrupación Atraper se polemizó que la pelea es por su liberación, así como de todos los presos políticos. Pero señalando que el gobierno de Castillo cedió a todas las presiones del Congreso y del imperialismo, sin dar ningún viraje en los intereses que vienen dirigiendo el país. Se trata de pelear por una alternativa que dé una salida de fondo a un régimen agotado, no solo un recambio de personas. Se trata de imponer la asamblea constituyente soberana.

También se dio el debate acerca de si era necesaria una reforma federalista de la Constitución peruana. Como contrapunto se dio allí el ejemplo de Argentina que, siendo una “República Federal”, afronta una crisis igualmente severa, producto del imperio de los mismos intereses capitalistas. Mientras los partidos del régimen peruano y el imperialismo maniobran con realizar elecciones anticipadas o incluso nuevos golpes, la lucha por la asamblea constituyente libre y soberana termina siendo el escenario más adecuado para que el enorme rechazo popular pueda canalizarse en un avance político de los trabajadores. Perú necesita, más que un viraje constitucional, un viraje de clase.

El acto de conjunto se pronunció, en un clima de gran confraternidad, por impulsar la lucha por la libertad de todos los presos políticos, incluyendo por supuesto a Pedro Castillo, y por la plena vigencia de las libertades democráticas.

Las compañeras Roxana Rueda y Milagros Barrios, referentes de Atraper, tomaron la palabra planteando las consignas de la lucha y la necesidad de continuar esta pelea. Para ello están por delante reuniones abiertas, charlas debate y, antes que nada, una gran movilización a la Plaza de Mayo el 1° de Mayo, el Día Internacional de los Trabajadores, para dar la pelea por un gobierno de los trabajadores en Argentina, Perú y todo el mundo.

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