Políticas

26/9/2001|723

Al borde de un ‘mendozazo’

Hace más de un mes que la provincia está al rojo vivo. El gobernador Iglesias no sólo ha emulado a De la Rúa-Cavallo. Violando todas las normas constitucionales ha impuesto un ‘ajuste’ a todos los estatales, que incluye a los que dependen del Poder Judicial y la Legislatura. La respuesta de los trabajadores no se hizo esperar: paros multitudinarios, manifestaciones y cortes de ruta y calles en toda la provincia. Mendoza se ha sumado a la Argentina ‘piquetera’.


El gobierno, sin embargo, no quiere dar marcha atrás. Se niega a acatar los fallos contra el recorte salarial, incluído el de la Corte; y aún más, aunque aislado y completamente desprestigiado pretende convocar junto a las próximas elecciones a un plebiscito para reformar el régimen político provincial, como De la Sota en Córdoba.


Las condiciones para torcer toda esta ofensiva han madurado plenamente. Un plenario de 800 delegados docentes, judiciales, empleados de organismos nacionales, provinciales y municipales, trabajadores de Vialidad, etc., el pasado 15 de agosto, resolvió medidas conjuntas hasta la derogación del ajuste. Las burocracias del Sute (docentes) y Ate especialmente, han violado, sin embargo, el mandato que emanó de ese plenario para poner en pié un Comité de Lucha conjunto y convocar a un nuevo plenario de delegados.


Esa convocatoria se dilata porque esas direcciones sindicales están embarcadas en el anodino Frente Nacional de la Pobreza, que impulsan los nuevos “Chachos”; los Farinello y Carrió. El viernes 14, aprovecharon la gira de la caravana del FreNaPo no para atacar el ‘ajuste’, sino para esperar los resultados del 14 de octubre y la ‘consulta’ por un subsidio de 380 pesos, sólo para los jefes de familia desocupados, para el 10 de diciembre. Se impone, por el contrario, impulsar lo resuelto el 15/8, en la perspectiva de la huelga general por tiempo indeterminado.


Los trabajadores autoconvocados de los hospitales, los delegados docentes, de ATE y judiciales *y especialmente los compañeros enrolados en las listas combativas de estos gremios*, tienen la responsabilidad de hacer cumplir el mandato del 15/8. Reclamar la convocatoria inmediata a un nuevo plenario de delegados con mandato de asambleas por lugar de trabajo, como el del 15/8; seleccionar un Comité de lucha conjunto de todos los gremios estatales y marchar a un plan de lucha hasta la huelga general por tiempo indefinido, reclamar a las CGTs y a la CTA la huelga general provincial.


Mendoza tiene entonces una salida, pero está en manos de los trabajadores.