Políticas

7/3/2023

Al pan, pan y al dólar vino

El gobierno anunció el "dólar Malbec", más beneficios cambiarios para las patronales contra el bolsillo de los trabajadores.

Viñedos.

El Ministro de Economía, Sergio Massa, anunció que a partir de abril habrá un dólar diferencial para el sector vitivinícola, con el objetivo de favorecer las exportaciones en compensación por el impacto de la sequía y las heladas tardías, y podría hacerse extensivo al resto de las economías regionales que exportan. Además se activará el Programa de Apoyo para Pequeños Productores Vitivinícolas de Argentina (Proviar II) mediante el financiamiento del BID y del Estado.

Así, el gobierno busca otorgarle beneficios cambiarios a las patronales vitivinícolas que oficiará como reaseguro de sus márgenes de ganancia en plena caída de la cosecha, pero encarecerá el precio del vino y de la uva. De hacerse extensivo a otras actividades también encarecerá el resto de los alimentos, algo que ya viene acicateado por la propia sequía. Otro golpe al bolsillo del pueblo trabajador.

Cabe destacar que la medida responde a que la sequía agrava la acuciante crisis de reservas del Banco Central, algo que pone en jaque el cumplimiento de las metas del acuerdo con el Fondo y paraliza la economía, presionando por una devaluación brusca del peso. Por eso el gobierno continúa con este esquema de desdoblamiento cambiario, a pesar de que implica una enorme emisión monetaria parasitaria que acelera la inflación.

Si bien aún se desconoce el precio que el gobierno determinará por cada dólar, una de las solicitudes con mayor reiteración fue el ajuste de un 40% por encima del dólar oficial. Las patronales también reclaman la eximición de las retenciones, pero ello es contrapuesto al cumplimiento de las metas fiscales del acuerdo con el FMI, por lo que de concederse sería compensando con más ajuste en otras áreas.

Además, para poner en marcha el Proviar II, el país se ha endeudado por 40 millones de dólares con el Banco Interamericano, una usina del imperialismo. El programa tiene como pretexto financiar nuevas tecnologías para las patronales vitivinícolas, cuando lo cierto es que los trabajadores cosecheros denuncian magros salarios y paupérrimas condicionales laborales. Por eso los viñeteros vienen de protagonizar una contramarcha durante La Vendimia reclamando aumento salarial y mejoras en las condiciones de trabajo, mientras Massa participaba de la gala empresaria anunciando estos beneficios cambiarios.

Esto cuando se sabe que los trabajadores cosecheros son conocidos en el mundo por sus magros salarios y paupérrimas condicionales laborales, un costo que las patronales buscan reducir sistemáticamente. Sin ir más lejos, los trabajadores viñeteros vienen de protagonizar una contramarcha durante La Vendimia reclamando aumento salarial y mejoras en las condiciones de trabajo, mientras Massa anunciaba esta garantía para las patronales.

Queda claro que al gobierno solo le importa el impacto de la sequía sobre las exportaciones y la recaudación de divisas, por eso lleva adelante este rescate de las patronales agrarias, ignorando los otros efectos sociales. Entretanto, también aplica un ajustazo contra los trabajadores, poniéndole techo a las paritarias, implementando tarifazos permanentes y avanzando en despidos en el Potenciar Trabajo.

Este tipo de promociones tuvo su antecedente con el dólar soja, con un impacto incluso mucho mayor, lo que muestra que este es un gobierno promotor de los agronegocios, los cuales están avanzando en la destrucción de los humedales y los bosques nativos repercutiendo con mayor reiteración y gravedad en las sequías, lo que agrava el problema.

No podemos ser los trabajadores los que sigamos pagando los platos rotos de la crisis. Solo el Frente de Izquierda propone echar a los políticos capitalistas y romper con el FMI para terminar con sus consecuencias para todo el pueblo trabajador.