Políticas
27/12/2025
Apoyo 100% de “La Neuquinidad” al presupuesto de Milei
Otra prueba irrefutable del apoyo de Figueroa a Milei.
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Si hacía falta alguna evidencia sobre el absoluto y total apoyo del gobierno de Neuquén a la política del gobierno nacional, ha quedado expresada en la votación de los senadores de “La Neuquinidad” a favor del presupuesto 2026, que constituye un ataque brutal a las condiciones de vida de la población trabajadora, la ciencia y la educación.
Al voto descontado del mileísmo que integra “La Neuquinidad” (la senadora y dirigente evangélica Nadia Márquez y el radical y empresario Pablo Cervi), también votó a favor la senadora Julieta Corroza, del riñón del gobernador y, hasta hace semanas, ministra de Desarrollo Social, Gobiernos Locales y la Mujer.
Corroza lo tuiteó con impunidad: “estamos avanzando” dijo.
En su intervención en el recinto dejó claro hacia dónde festeja: festejó que como ministra rebajó los planes sociales de 26.000 a 9.000. Una masacre social, porque como los propios datos oficiales reconocen que la desocupación y subocupación ronda el 12% en la provincia, quiere decir que hay miles de desocupados y subocupados que no reciben siquiera el monto de los miserables planes sociales provinciales.
Otro aspecto fundamental, ligado a su apoyo al presupuesto misógino y de desmantelamiento de los organismos que protegen los derechos de la mujer, es que durante sus dos años como ministra del ramo, Neuquén batió récord de feminicidios y la senadora votó cuando en la provincia se buscan tres mujeres desaparecidas hace días y se confirma otro feminicidio en la localidad de Centenario. Como ministra avaló que se secuestrara y arrebatara con la policía armada y funcionarias judiciales un niño a su madre, porque quien lo determinó así fue el padre de la criatura que es un alto funcionario del gobierno. Votó por los intereses del misógino gobierno nacional, sin el menor pudor por lo que ocurrió y ocurre con las mujeres en su provincia, y encima lo hizo arrogándose que su voto representa “la voz de las neuquinas”. Una burla que debe ser repudiada por el movimiento de mujeres que en estos días se organiza para reclamar la aparición de las tres mujeres desaparecidas, como ocurre desde hace meses con el reclamo de aparición con vida de Luciana, una estudiante a la que se la tragó la tierra.
No, la voz de las y los neuquinos no se expresa cuando la senadora Corroza habla. Se expresa la voz de lo más podrido de la casta emepenista ahora convertida en “La Neuquinidad”.
La queja y dos mentiras
Durante su discurso en el Senado, Corroza reclamó por deudas que tiene Nación con la provincia, entre ellas con la Caja Previsional por U$S 155 millones. Pero se enorgulleció de la obra pública que el gobierno local ejecuta con fondos propios, cuando eso ocurre porque el gobierno nacional, y el presupuesto que votó, excluye fondos nacionales para la obra pública. Eso solo bastaría para votar en contra si de expresar la voz de las y los neuquinos se trata.
Porque además reclamó que la provincia aporta cuatro puntos del PBI nacional pero recibe mucho menos que lo aportado. Como ella misma lo dijo, “no es queja, sino proyección a futuro”. En otras palabras le aclaró a Milei-Caputo-Sturzenegger que cualquier reclamo es para la tribuna. Nada serio, sino solo para fingir que expresa un reclamo. De esta manera “La Neuquinidad” (una entelequia chovinista y falsa) se sube al carro de la subordinación al colonialismo de Eestados Unidos, el FMI y los fondos buitre.
Por último las mentiras. Dijo la senadora que “La Neuquinidad es una alianza que reúne ideologías de izquierda a derecha, pero nos une sacar adelante a Neuquén”. En primer lugar no hay ningún sector de la izquierda en esa alianza. Abundan el mileísmo y lo más rancio de las organizaciones antiobreras. Y si por izquierda se refiere al Partido Socialista o el Frente Grande o el Movimiento Evita, la senadora finge desconocer la política que llevan adelante los ministerios y organismos que dirigen esas fuerzas.
La segunda mentira es que se han unido “para sacar adelante a Neuquén”. La provincia se encamina a transformarse en una factoría de exportación de materia prima (hidrocarburos casi en exclusividad). Mientras, la contracara, es el cierre de plantas industriales (las pocas que hay) como las cerámicas (ex Zanón y ex Neuquén) o la Planta de Agua Pesada. Todas ellas porque no pueden afrontar los tarifazos de la electricidad y el gas, en una provincia que aporta cuatro puntos del PBI nacional por la producción de ambos, pero paga salarios por debajo de la línea de pobreza a docentes y estatales.
En síntesis, la senadora de “La Neuquinidad”, como no podía ser de otra manera, expresó la voz del gobierno nacional, no de los miles y miles de neuquinas y neuquinos que se hunden en la pobreza.
