Políticas

6/6/2020

Avance de los contagios en La Boca: ¿cómo nos organizamos los vecinos?

A pesar de los dichos del gobierno nacional y el jefe de gobierno de la ciudad, el Covid-19 está en crecimiento en los sectores populares. En el barrio de La Boca, en una semana se cuadriplicaron los casos y se pasó de 20 casos hace una semana a 130 el día de hoy.


En el caso de la Boca, la vivienda en conventillos o los asentamientos como el de Lamadrid aumentan el riesgo de contagio de covid-19 por las características habitacionales que presentan, pero también son el segundo foco de los casos de dengue después de la Comuna 8. A este cuadro actual insalubre y precario, donde la asistencia estatal brilla por su ausencia, se suma la política del Gobierno de la Ciudad (pre pandemia) que favorece el avance de los grupos inmobiliarios en el barrio, el copamiento de terrenos para el desarrollo inmobiliario del distrito de las artes, la entrega de los terrenos de Casa Amarilla, el encarecimiento de los alquileres y la expulsión de vecinos del barrio mediante la coartada de las relocalizaciones. Ambas problemáticas colocan a La Boca en una alarmante emergencia habitacional, sanitaria y alimenticia.


La escalada del virus en la Boca llega cuando el gobierno de la ciudad (apoyado y hasta felicitado por el gobierno nacional) ya ha mostrado su incapacidad de respuesta frente a la pandemia en otros barrios populares y villas de la ciudad. Al momento, el 50% de nuevos contagios se da en estos sectores y las medidas que parten del gobierno pretenden que sean los vecinos quienes sean responsables de la asistencia durante la pandemia, ya sea dejando en sus manos las Postas de Salud, el Operativo Detectar o como pasa con la asistencia alimentaria donde los propios vecinos organizan las colectas para asistir a los comedores populares ante las pobrísimas provisiones del gobierno de la ciudad y el nacional. Por el lado de los cuidados higiénicos son conocidas las denuncias por falta de suministro de agua y por falta de entrega de kit de limpieza. Desde el punto de vista económico, el gobierno nacional aún no ha asignado el IFE (Ingreso Familiar de Emergencia) a la totalidad de los vecinos mientras el número de desocupados o suspendidos sin goce de sueldo aumenta.



Mientras transcurre la pandemia y aumentan las necesidades populares, la política del Estado es seguir favoreciendo a la burguesía con la excusa de la pandemia, ahogando a los sectores populares y desligándose de la responsabilidad de la asistencia, al tiempo que se endeuda con organismos internacionales (como es el caso de la Ciudad, donde Rodríguez Larreta se endeudó en 150 millones de dólares) para obras que nunca llegan a los barrios.


La factura para los sectores de trabajadores y desocupados viene por partida doble: pagar las deudas que toma el Estado y autoasistirse sin elementos materiales y económicos y en condiciones de confinamiento y precariedad.


Bajo este cuadro, es necesario organizar a los vecinos con independencia del Estado y los partidos patronales, que son los responsables de la propagación del virus Covid-19 y el dengue en La Boca y de la situación de vulnerabilidad de los vecinos del barrio previo al estallido de la pandemia. La pelea por reclamar al Estado la asistencia inmediata, está unida a la pelea de los sectores de los trabajadores de la salud que ni siquiera han recibido el bono prometido por Alberto Fernández, y a la pelea de miles de trabajadores que se organizan ante los despidos y suspensiones.


Desde el Partido Obrero La Boca planteamos:


1.       Testeos masivos a familias y contactos estrechos de infectados ya sea de vecinos como de organizaciones.


2.       Agua potable para todos los habitantes las 24hs.


3.       Vivienda transicional para personas infectadas y asistencia económica a familiares


4.       Desinfección, descacharreo y fumigación de espacios comunes. Entrega de kits de limpieza e higiene.


5.       Presupuesto de emergencia para salud, hospitales y cesac (centros de salud comunitarios).


6.       Asistencia económica y alimentaría a familias de barrios populares. Control de alimentos por organizaciones barriales.


7.       Asistencia económica y de vivienda a víctimas de violencia de genero.


8.       Información correcta sobre el estado de avance de la enfermedad.


9.       Rechazamos la represión contra la juventud y la utilización de las Fuerzas Armadas y de seguridad en la asistencia social. Libertad para organizarse y reclamar tomando medidas de distanciamiento social.


10.   Conformación de un comité territorial de seguridad e higiene integrado por vecinos, organizaciones y trabajadores de la salud, con control de protocolo y con autoridad de seguimiento del personal designado por autoridades del ministerio de salud, IVC (Instituto de la Vivienda) y hábitat.


11.   Postas de salud con personal profesional