Políticas

20/1/2011|1163

Avellaneda: los trabajadores reclaman 2.500 pesos de básico

Y dicen basta de arbitrariedad y discriminación

-Exclusivo de internet

Los compañeros de salud de la Municipalidad de Avellaneda realizaron una batucada el miércoles 12, en el edificio municipal, cortando la calle en forma intermitente. Reclaman aumento de salarios y denuncian el vaciamiento de la salud pública en el municipio de Avellaneda. Las unidades sanitarias, los institutos, el hospital están vaciados de recursos humanos, producto de los salarios miserables.

El 28 de diciembre, un grupo de municipales realizó un escrache al intendente, una compañera lo increpó, mostrando su recibo de 1.300 pesos, Ferraresi respondió que “paga salarios entre 5.000 a 7.000 pesos a los que “colaboran con la gestión”. La realidad es muy distinta, el sueldo básico de una enfermera o administrativa es de 1.050 pesos y de un médico es de 1.800. Está claro que atender la salud de la población como lo hacen los trabajadores de los centros de salud no es considerado “como aporte a la gestión por Ferraresi”.

El intendente Ferraresi en un comunicado dice que quiere “empleados versátiles”, que “colaboren”. Quiere empleados municipales que no reclamen por sus derechos, quiere profundizar la flexibilidad laboral existente, porque no se entregan ropa y útiles de trabajo en tiempo y forma. En el hospital se entrega una muda de ropa por gestión, o sea cada cuatro años, y en las unidades sanitarias no se entregó nunca. Hace tres años esta flexibilidad laboral costó la vida de un compañero obrero. Como lo denunciaron los compañeros de la agrupación clasista Luis Pons, que vienen luchando y haciendo retención de tareas desde hace más de tres años en el corralón de Obras Públicas.

Ferraresi quiere empleados versátiles, que empujen camillas por la rampa del hospital, ya que tres de los cuatro ascensores no funcionan y, al menos una vez a la semana, no funciona ninguno.

Basta de arbitrariedad Los trabajadores de la salud, acompañados por delegados de otras dependencias y por los compañeros de obras publicas agrupados en la Luis Pons, reclamaron aumento salarial y denunciaron el reparto de una bonificación llamada compensación extralaboral que el intendente repartió el lunes 10, de manera discrecional, arbitraria y discriminatoria en Obras Públicas, al mejor estilo del clientelismo.

El día anterior a la manifestación, la patronal municipal anunció el pago de una suma fija de 300 pesos con el sueldo de enero y otra similar para febrero, pegando grandes cartelones con el decreto, intentado desmovilizar a los trabajadores. Demostrando que no aumenta el salario básico porque quiere tener de rehenes a los trabajadores, que para poder sobrevivir deben hacen entre 4 y 6 horas extras diarias, las que se pagan simples, violando las leyes laborales y luego extorsionar a esos empleados que si reclaman sus derechos les quitan las extras.

El intendente Ferraresi no quiere empleados con derechos laborales. Como la multinacional Nidera quiere trabajo esclavo.

La lucha sigue

En el plenario abierto de delegados realizado del vienes 14, compañeras de dependencias de salud denunciaron persecuciones de parte de directivos y jefes por lo que se resolvió hacer el lunes una nueva batucada de los trabajadores de la salud el lunes 17 y el jueves 20 movilizar nuevamente al municipio todos los sectores.

El día de la batucada, representantes del ejecutivo recibieron una delegación del sindicato, los que informaron los motivos de la acción, que está encabezado por el reclamo de aumento salarial, que la comisión directiva considera debe ser igual al salario mínimo vital y móvil 1.840 pesos y que los carteles de los compañeros movilizados fija en 2.500 pesos.

La movilización del 20 tiene que nuclear a los municipales de todas las dependencias y continuar el plan de lucha hasta terminar con la arbitrariedad y discriminación. Por un salario de 2.500 pesos para la categoría inicial; por el respeto a los derechos laborales. Por condiciones de seguridad e higiene controlada por los trabajadores. Por la derogación de la ley 11757.