Políticas

11/5/2006|945

Blumberg fue rechazado


La visita de Juan Carlos Blumberg a Tucumán no sólo tuvo acogida entre las ONGs ligadas a las aparatos de seguridad. Alperovich y el ministro de Seguridad lo recibieron “oficialmente”. El gobernador acababa de ratificar el cierre de boliches a las cuatro de la mañana, algo muy parecido, en definitiva, a lo que propone Blumberg.


 


 


 


El martes por la tarde, Blumberg participó de la marcha con más de tres mil personas, por el esclarecimiento del crimen de Paulina Lebbos. La presencia del Polo Obrero y el Partido Obrero, con más de 500 compañeros y un cartel, estaba encabezada por la consigna: “No a la reelección de los responsables de la inseguridad”.


 


 


 


Al llegar a la Plaza Independencia, comenzó un acto que abrió el padre de Paulina y que se disponía a cerrar Blumberg. Pero una de los oradoras, Elena Soria, presidenta del Centro de Estudiantes de Filosofía y Letras, quebró el libreto. Como relata La Gaceta, Soria señaló: “La inseguridad proviene del Estado y de los políticos que amparan a las mafias. Por eso, le decimos al señor Blumberg que los jóvenes no queremos más policías ni más mano dura” (10/5). La misma posición había expresado Martín Correa por la mañana en la Constituyente. Nuestra compañera Elena fue aclamada. Sigilosamente, el “ingeniero” se fue desplazando hacia un costado del palco y renunció a su pretensión de cerrar el acto.


 


 


 


El movimiento de lucha por Paulina quebró, de este modo, una tentativa de distorsionar las movilizaciones, cada vez más numerosas, por el esclarecimiento del crimen y el castigo a los culpables.