El sábado 6 de abril, trabajadores y vecinos del barrios nos reunimos en la asamblea abierta del Partido Obrero en el local de Flores para discutir cómo vamos a enfrentar a este gobierno que está llevando a cabo una ofensiva contra los trabajadores; con miles de despidos en el Estado que se replican en el sector privado, con la motosierra sobre los salarios, congelando las jubilaciones en su mínimo histórico, con el recorte de la transferencia de alimentos a los comedores populares, etc. Lo mismo vale para el recorte educativo y todo un sinfín de ataques al conjunto de los trabajadores y el movimiento popular.

Del debate participó nuestra compañera Vanina Biasi, diputada nacional electa por el FIT-U y delegada de los trabajadores no docentes de la comisión interna de la Facultad de Sociales. Hizo una breve introducción sobre el cuadro que se abre frente a un gobierno que le ha declarado la guerra a los trabajadores y que hasta el día de hoy cuenta con el aval de toda la oposición patronal que se muestra siempre predispuesta a negociar con él.

Ligado a esto, varias compañeras intervinieron para denunciar la parálisis de las centrales sindicales ante semejante ataque y contaron cómo en sus lugares de trabajo o diferentes espacios se les dice que hay que esperar, que no hay condiciones para enfrentar al gobierno. Una política conservadora que lo único que hace es darle tiempo a Milei para que pueda hacer pasar toda su política de ataque a los trabajadores. Otra de las denuncias en ese sentido fue a la CGT, que se encuentra negociando con el gobierno una reforma laboral propatronal mientras deja pasar miles de despidos y una licuación histórica del salario.

La preocupación sobre qué medidas tomar ante este ataque histórico fue discutida. Se colocó la importancia de agitar la huelga general como única medida a la altura para enfrentar al gobierno y luchar en todos los sectores por ella. La burocracia agita el paro, pero para descomprimir y negociar en sus propios términos.

En el debate se hizo referencia a la importancia de salir a discutir fuertemente no solo con los sectores más afines sino también con los trabajadores que todavía tienen una expectativa en el gobierno de Milei y están sufriendo el brutal ajuste. Muchos de estos tienen una fuerte indignación con los gobiernos anteriores, porque los han empobrecido y han empeorado sus condiciones de vida mientras se postulaba que con el gobierno “nacional y popular” el Estado está “presente”. Atado a esto se introdujo la importancia de una delimitación programática muy fuerte con el kirchnerismo para no quedar pegados a los gobiernos anteriores como intenta hacer discursivamente el gobierno

También se mencionó la importancia del movimiento de mujeres y diversidades en la lucha política que se abre. Se colocó el ejemplo de Davos, donde el presidente atacó tanto al “cooperativismo” como al movimiento de mujeres. Este movimiento representa un gran temor para el gobierno, ya que en los últimos años con movilizaciones de masas le ha arrancado conquistas históricas al Estado como la IVE.

No faltó dentro de las intervenciones la situación de los barrios más empobrecidos, que en el último tiempo se han visto afectados por las inundaciones y en particular con la política hambreadora del gobierno de dejar sin alimentos los comedores populares. Las compañeras contaban cómo sectores afines al gobierno las atacan por su nacionalidad y con el mote de “planeras”, pero que ante estos ataques demuestran que mientras ellas llevaban a cabo largas jornadas laborales rebuscándoselas ante la falta de trabajo genuino, tanto el presidente como la vice con diputados y senadores buscaron aumentarse aún más sus jugosos sueldos. En esa línea también contaron que el gobierno ha envalentonado los discursos negacionistas de la última dictadura y que están llevando a cabo una lucha política tenaz teniendo debates en el barrio, denunciando las atrocidades de la última dictadura junto con la defensa de las libertades democráticas que son atacadas constantemente por los sucesivos gobiernos.

Por último, intervinieron varias compañeras docentes denunciando el ataque del gobierno a la docencia, que con la excusa de atacar el adoctrinamiento (una caradurez total ya que es el Estado el primer adoctrinador) busca perseguir la libre organización de los trabajadores y negar la libertad de cátedra. También apareció la dificultad particular en esta etapa para organizarse en asambleas en los colegios, dado que ante el ataque al salario y las condiciones de trabajo del gobierno de la Ciudad, la dirección de UTE viene desenvolviendo una política de parálisis.

Finalizando la asamblea, se resolvieron iniciativas de cara a los problemas que fueron planteados. En primer lugar realizar la semana que viene una pintada con la consigna “Derrotemos a Milei con la huelga general”. Por otro lado, de cara a la problemática de los discursos negacionistas, organizar un cine debate al respecto, a realizarse en nuestro local del Bajo Flores que permita abrir la discusión y enfrentar la propaganda reaccionaria del gobierno. Y para finalizar una charla/plenario de los docentes del barrio para discutir cómo intervenir en los colegios destrabando la problemática de las asambleas que no llegan a realizarse.

Hay fuerza para derrotar a Milei, sumate a las actividades del barrio.

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