Carlos Heller: Otro candidato trucho

El lanzamiento del banquero Carlos Heller como candidato del oficialismo en la capital desató una crisis con el pejotismo local, que reclama la cabeza de la lista para sí, con preferencia para Daniel Filmus. Como se ve, estamos ante una disputa por el visto bueno del mismo amo: Kirchner. El candidato ‘testimonial’ o trucho no es solamente el que adelanta que otro personaje asumirá el cargo en lugar de él; es también trucho el que se postula para realizar una política que no piensa poner en práctica. Si los derechistas Scioli u Othacehé (intendente de Merlo) son candidatos ‘testimoniales’, o sea truchos, de Kirchner, y el izquierdista Heller también se presenta como el candidato de Kirchner, es claro que Heller es completamente trucho – sin haber pasado por la categoría de ‘testimonial’. Heller se involucró, con el pejotista Santa María, del Suterh, en la privatización de las jubilaciones de Menem (Previsol), o sea que fue un instrumento, con beneficio propio, de la convertibilidad de Cavallo. Luego apoyó la pesificación asimétrica, como todos los banqueros, o sea la confiscación de los depósitos de sus clientes. Más tarde adhirió con fervor al ‘modelo productivo’. Políticamente, al menos, no resiste ningún archivo.