Carta abierta con Filmus y Tomada, el Frente de Izquierda con los docentes de Santa Cruz

Declaración de la coordinación de la asamblea de docentes, intelectuales y artistas en apoyo al Frente de Izquierda

Hace pocos días se ha hecho pública una nueva declaración de Carta Abierta, que busca apoyar la fórmula kirchnerista de Daniel Filmus y Carlos Tomada en las próximas elecciones porteñas, que se realizarán el 10 de julio. Contra el “modelo de ciudad” macrista, los intelectuales de Carta Abierta reivindican el “derecho” a una ciudad donde se exprese “la polifonía dispar de las lenguas que la habitan” y lo “indígena soterrado” en ella, reclamando que sea espacio de “la política pública” en las plazas y que sea un “lugar de la memoria”.

La memoria de estos intelectuales, no obstante, falla cuando se trata de las “plazas”: olvidan los episodios de fines del año pasado en el Parque Indoamericano, donde la política racista y represiva de Macri fue acompañada por la Policía Federal dependiente del gobierno nacional, con el saldo de tres compañeros asesinados; luego, Aníbal Fernández se encargó de extorsionar en vivo y en cadena nacional a quienes reclamaran en las calles con la quita de planes municipales y nacionales. Carta Abierta olvida, también, que el hasta hace poco aliado clave del gobierno, Sergio Schoklender, estuvo entre las principales voces que pidieron la represión. No se trata de un olvido casual: los autores de la nueva Carta Abierta tienen que defender a un gobierno nacional que no muestra ningún empeño en que “la polifonía” que habita la Ciudad tenga acceso a una vivienda digna. La carta denunciaba la “privatización de las riberas del Plata, limitándolas a coto para viviendas y consumo suntuarios”; precisamente, en las mismas horas en que el gobierno nacional reprimía la protesta de los vecinos contra el Vial Costero en Vicente López, una de las expresiones más extremas de esa privatización.

En la nueva Carta Abierta no hay lugar, tampoco, para señalar que la criticada “Buenos Aires gerencial” no comenzó con Macri, sino que viene de largo: la creación de la Corporación Puerto Madero y Buenos Aires Sur, la utilización de los fondos del Banco Ciudad para el pago de la deuda pública, la privatización y la formación de ‘cajas paralelas’ fue iniciada por los Grosso y los Domínguez, y continuada por los Telerman y los Ibarra -que hoy se presenta como “colectora” de los candidatos que defiende Carta Abierta. No hay lugar para destacar que esa misma “Buenos Aires gerencial” es ‘gerenciada’, hoy mismo, tanto por el PRO como por los kirchneristas: desde las votaciones conjuntas en la Legislatura hasta la integración de los mismos kirchneristas como ‘gerentes’. Hasta hace muy poco, el presidente de la Corporación Puerto Madero era nada menos que un dirigente de La Cámpora.

La privatización de la Ciudad de Buenos Aires sólo pudo llevarse adelante con la colaboración de los burócratas sindicales devenidos en empresarios: Carta Abierta olvida justamente mencionar el punto cuando su lista de legisladores lleva como candidato a Alejandro Amor, burócrata del Sutecba, y uno de los más importantes socios del macrismo. Por ello, tampoco sorprende que en la Carta Abierta no haya lugar para denunciar que entre los representantes del supuesto proyecto nacional y popular para candidatearse al gobierno porteño se encuentra un íntimo aliado de Pedraza y abogado de la Unión Ferroviaria por más de veinte años: Carlos Tomada. La Carta guarda silencio sobre los vergonzosos diálogos íntimos entre el actual ministro de Trabajo y José Pedraza, secretario general de la Unión Ferroviaria y responsable principal del asesinato de Mariano Ferreyra, en los cuales se los sorprendió in fraganti cuando aconsejaba a Pedraza “hacer un laburo sindical sobre estos tipos que entran”, conspirando para limitar la influencia de la izquierda entre el activismo que conquistó con dura lucha -contra el Estado y contra la UF- el pase a planta permanente.

En la Carta no hay lugar, junto con las demandas al gobierno municipal de más y mejores escuelas que encabezaron con su lucha miles de estudiantes secundarios, para reclamar más y mejores universidades; es que aquí, los estudiantes y docentes se enfrentaban con los rectores K y al propio gobierno nacional. Ni hay lugar para decir que Filmus, que fue presentado como la opción progresista de Cristina frente al actual candidato a vicepresidente (ex Cema y ex Ucedé) Amado Boudou, tiene dudosos pergaminos de “progre”: se trata de uno de los principales responsables de la Ley de Educación Superior impuesta bajo directivas del Banco Mundial, que significó una degradación de la educación y le imprimió un marcado sesgo privatista.

Los “desmemoriados” intelectuales K no advierten que lo ocurrido con el caso Schoklender ha puesto de manifiesto, de una manera brutal, cuál es la verdadera cara de la tan festejada ‘política cultural’: la integración y la cooptación de las organizaciones populares al Estado, con su correlato de corrupción y disgregación. En la Carta Abierta no hay lugar para señalar que los mecanismos de cooptación y regimentación estatal kirchnerista derivaron en los escándalos del Inadi y el caso Schoklender, y esto justamente cuando el oficialismo quiso usufructuar las luchas democráticas en las propias listas a legisladores de la Ciudad, con una María Rachid que ahora buscan sacar de escena. Tampoco hay lugar para denunciar que lo “indígena soterrado” estuvo presente en la Ciudad durante meses, con el acampe de la comunidad Qom en la avenida 9 de Julio, pidiendo justicia por el ataque de Insfrán, aliado de este gobierno, y mucho menos que fueron hostigados por La Cámpora.

No alcanzó a secarse la tinta de la Carta Abierta 9, cuando el jueves 23 de junio, la Policía Federal, comandada por Nilda Garré, llevó adelante la represión contra el acampe de la delegación de docentes de Santa Cruz, del que participó también el Frente de Izquierda y los Trabajadores. Por si esto fuese poco, el candidato de Carta Abierta, Daniel Filmus, se encargó de reivindicar abiertamente la represión mostrando la realidad del proyecto que defiende. Los trabajadores de la provincia de la Presidenta viajaron miles de kilómetros para buscar una solución a sus reclamos y el ministro de Trabajo y candidato a vicejefe de Gobierno se negó a recibirlos. Durante estos más de 50 días de huelga han recibido por única respuesta a sus reclamos la represión, el hostigamiento de agrupaciones oficialistas como La Cámpora, e incluso el intento de bloqueo por parte de la gendarmería del arribo a la provincia de la caravana de solidaridad con su lucha, que llegaba desde distintos puntos del país.

¿Es esto lo que tiene para ofrecer Carta Abierta para la Ciudad de Buenos Aires? Frente a este proyecto, y al de la centroizquierda sojera de Pino Solanas (que ante los empresarios de Idea propone un organismo que “supervise” las manifestaciones para sacarlas de las calles), separada sólo por la distribución de cargos de sus aliados naturales como Binner y Luis Juez, representantes también de las grandes empresas automotrices del país, el Frente de Izquierda ha ganado numerosos apoyos de intelectuales, docentes y artistas, y ha abierto un auspicioso debate no sólo sobre cuestiones inmediatas, como el programa del Frente, sus perspectivas en la arena electoral y la pelea democrática contra las condiciones proscriptivas impuestas por la nueva ley electoral, sino problemas de más largo aliento, como la expresión de una opción política independiente, la lucha contra el trabajo en negro, precario y la superexplotación, la opresión nacional por parte de las naciones imperialistas, la destrucción del medio ambiente por parte de los monopolios y los agravios e injusticias que cotidianamente sufre nuestro pueblo trabajador. Una expresión activa de este apoyo fue la asamblea realizada el 17 de junio en la Facultad de Ciencias Sociales, donde 300 participantes discutimos cómo tomar en nuestras manos el apoyo al Frente y batallar contra la idea pretendida por los intelectuales K de que “a la izquierda del kirchnerismo está la pared”.

Los intelectuales, docentes, artistas y trabajadores de la cultura que apoyamos al Frente de Izquierda defendemos una alternativa a la “construcción cultural” de los kirchneristas: una alternativa que no puede ubicarse en otro lugar que junto a los trabajadores. Los candidatos del Frente de Izquierda y de los Trabajadores están a la cabeza de las principales luchas de los trabajadores y combates democráticos. Myriam Bregman, candidata a jefa de Gobierno, ha defendido a cientos de trabajadores y procesados por luchar; como parte del colectivo Justicia Ya!, que reúne organismos que se han mantenido independientes del gobierno durante estos años, ha llevado la querella en los juicios contra los represores, entre ellos el de la mega-causa Esma, aquella en la que se juzga a los asesinos de quien en una esquina de esta ciudad enfrentara a sus captores cuando difundía una “Carta Abierta” contra la junta militar que retomaba la tradición de cartas públicas en defensa de las causas justas y denunciando a los Estados que eran responsables de esas demandas insatisfechas. Nuestra lista de candidatos a legisladores está encabezada por Marcelo Ramal, que viene desarrollando una tenaz campaña que ha puesto en evidencia, a través de debates y polémicas, la orientación social reaccionaria del macrismo, la centroizquierda y los K, que vienen “cogobernando” la Ciudad de Buenos Aires desde hace años. Nuestras listas incluyen a quienes fueron parte de la lucha de docentes y estudiantes universitarios, como el candidato a vicejefe de Gobierno, José Castillo, docente universitario de larga trayectoria en la UBA y otras universidades, y luchador del gremio docente universitario. También integran las listas del Frente de Izquierda, Alejandro Lipcovich, presidente de la Fuba y candidato a legislador; quienes enfrentan en el Indec las patotas K, como Marcela Almeida; u ocupan un lugar destacado en las luchas contra la burocracia y una nueva dirección sindical, como Claudio Dellecarbonara y Vanina Biasi.

El Frente de Izquierda y de los Trabajadores pone en primer plano la pelea por terminar con las tercerizaciones y por eso estuvo en la primera línea de la lucha de los ferroviarios. Plantea la necesidad de una reforma urbana integral para terminar con la situación de emergencia habitacional que tienen 150 mil familias en la Capital, la ciudad más rica y más desigual del país: por eso nos movilizamos a pesar del cerco policial en apoyo al legítimo reclamo de los ocupantes del parque Indoamericano. Después del triunfo que ha representado la obtención de una banca obrera y socialista en las últimas elecciones de Neuquén, tenemos planteada una lucha política para llevar a la izquierda a la Legislatura porteña, que sea una tribuna para los trabajadores que viven y trabajan en la ciudad, para luchar contra los pactos que tanto abundaron entre el macrismo, la centroizquierda y los K. Frente a la apología del “mal menor” que proponen los intelectuales de Carta Abierta que llaman a votar a los Filmus-Grosso y a los Tomada-Pedraza, los docentes, intelectuales, universitarios y artistas que apoyamos al Frente de Izquierda llamamos a dar una pelea de fondo para que las banderas históricas de la izquierda y del socialismo se transformen en una alternativa política para millones de trabajadores.

2 de julio