Castillo prepara su propio golpe
Con la complicidad de Barrionuevo
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De acuerdo a las disposiciones del Tribunal Electoral de Catamarca y a la Constitución de la provincia, las elecciones interrumpidas el domingo pasado deberían reanudarse a más tardar el último domingo de marzo. En tal caso, Barrionuevo quedaría excluido, lo que ha llevado al trascendido de que sería sustituido como candidato por otro peronista de apellido Jalil.
Sin embargo, una suerte de crisis en el Frente Cívico ha desatado el cuestionamiento a su candidato a gobernador, Brizuela del Moral. Se trata, en realidad, de un intento del actual gobernador, Castillo, para postularse él a una reelección, lo que exigiría un nuevo proceso electoral, el cual recién culminaría en el segundo trimestre del año.
Esta tentativa de golpe del gobierno radical-frepasista-lopezmurphysta no sería posible sin la venia de Barrionuevo, que en este caso recibiría la credencial para presentarse como candidato. El golpe “cívico” sería el salvoconducto que legitimaría el golpe patotero del domingo pasado.
El Partido Obrero denuncia la complicidad entre los dos jefes de la rosca catamarqueña que se esconde detrás de un enfrentamiento de clanes pero no de intereses de clases. También denuncia que el dominio de cualquiera de estas dos trenzas es incompatible con la democracia y con las más elementales aspiraciones del pueblo con hambre. Esta rosca se produce cuando el gobierno nacional acaba de decretar la imposibilidad de aumentar los impuestos y los aranceles a los pulpos mineros de la provincia, condenando a los catamarqueños al saqueo de sus riquezas naturales.
Todo esto confirma el acierto de la consigna popular de “que se vayan todos” y nuestro planteo de que el poder pase a una Asamblea Constituyente soberana. Llamamos al pueblo a una movilización general para reclamar que se hagan efectivas las elecciones interrumpidas por el vandalismo de Barrionuevo y la complicidad de Castillo, que aprovecha ese vandalismo para repostularse a la gobernación.