Los trabajadores de la salud que estaban en estado de alerta y quite de colaboración han ido avanzando en su plan de lucha. Con asambleas y movilizaciones cada vez más masivas frente al hospital más importante de la provincia, el San Juan Bautista, uno a uno se han ido sumando los distintos centros de salud del interior y el Hospital de Niños, el segundo en importancia en la provincia. Reclaman un básico de 750 pesos. El motor de la lucha es el Siprosca, un sindicato combativo que se ha ido transformando en el canal de conjunto de los trabajadores de la salud, superando a Atsa, que hoy es sólo un cascarón vacío. Desde el Siprosca se ha impulsado una coordinación con la Asociación Médica, se ha impulsado la creación de una coordinadora por el salario y la agrupación de “autoconvocados por el trabajo genuino” para luchar por el pase a planta permanente de los trabajadores becados y de los planes. “Tenemos que hacer como los compañeros de Metrovías, que fueron a fondo, pasando por arriba de la burocracia”, dijo el pediatra Toledo; “el ejemplo son los compañeros de Salta, hagamos como ellos”, indicó “Tato” Traverso, secretario general del Siprosca. Van por más.