Por las lluvias la situación de las barriadas se ha agravado. Casas inundadas y calles intransitables vuelven más precarias las vidas de los trabajadores.

 

De la situación actual es responsable el gobernador Domingo Peppo, que fue intendente de la ciudad y se encargó de vaciar el municipio generando una enorme deuda municipal sin invertir eficazmente en maquinaria que permita hacer frente a una situación que era previsible luego de varias sequías y por las reiteradas alertas meteorológicas producto del fenómeno climatológico de la corriente del niño. Mientras saqueaba el municipio, las obras hídricas, como desagües, tan necesarias hoy, fueron dejadas de lado.

 

La responsabilidad también recae en el gobierno municipal actual. El presente intendente, Adalberto Papp (también del justicialismo), no abrió las cuentas del municipio, lo que nos hubiera permitido determinar con mayor eficacia el saqueo de Peppo al municipio.

 

En una ciudad que año a año se extiende se vuelve más difícil satisfacer las necesidades de los barrios sin maquinaria adecuada y sin personal suficiente. Los trabajadores municipales siguen precarizados, cobrando salarios miseria. Los pases a planta y las re-categorizaciones municipales siguen siendo dilatados por lo que la capacidad de atender las demandas de los barrios se vuelve escasa o  nula.

 

 

 

Proponemos:

 

-La apertura de los libros contables del municipio para saber con qué deudas nos deja el gobierno anterior y con qué recursos contamos para hacer frente a las necesidades de los barrios.

 

-Por un plan de obras hídricas para toda la ciudad.

 

-Pase a planta de todos los trabajadores municipales, por su re-categorización para hacer frente a las necesidades del barrio con trabajadores bien remunerados, con seguridad laboral y con el equipamiento adecuado.