Clarín, en una nota publicada el 15 de abril, miente descaradamente planteando que “la única billetera abierta es para la ministra Pettovello según Milei”, mientras prosigue explicando que la prioridad sería asegurar la continuidad de todo el paquete de programas sociales, asignaciones y jubilaciones. Por mas que sean afirmaciones de Milei, llama brutalmente la atención que el diario las considere como verdaderas sin contrastarlas con la terrible realidad.

Pero desgraciadamente para las masas trabajadoras “la billetera” está más cerrada que nunca. El gobierno le sacó la comida a los comedores populares, incluso escondieron los navideños comprados por el gobierno anterior, mostrando una perfidia pocas veces vista.

Si bien le adjudicaron fondos a las instituciones religiosas, estas admitieron que no tienen el personal necesario para cumplir este servicio social. Lo cual tiene como resultado que la ayuda social no está llegando a los barrios mes humildes de nuestro país, en un cuadro de aumento de la carestía sin precedentes, con un millón de nuevos pobres por mes.

Cuando el presidente, poca afecto a la verdad, dice que los programas sociales se mantienen, francamente no sabemos de qué está hablando. Están aumentando los despidos en el Potenciar Trabajo, con diferentes medidas arbitrarias, ilegales y de manipulación de datos, que incluso han sido llevadas a la Justicia, como lo hicieron las organizaciones sociales y piqueteras de la Utep y el Polo Obrero hace pocas semanas.

El anuncio del gobierno de que los Potenciar Trabajo dejan de estar atados al salario mínimo tiene como objetivo el congelamiento de los mismos en un cuadro de una carestía insoportable, en una clara intención de reducción del presupuesto y que los “Potenciar” pierdan vigencia como reivindicación.

El otro anuncio gubernamental de cambio de modalidad de los programas y su división en dos grandes áreas no tiene aún una implementación clara, posiblemente nunca la tenga.

Los convenios que se utilizaban para proveer de comida y materiales fundamentales para las cuadrillas y los comedores han sido cerrados. Hasta el Pnud (asistencia para comedores y merenderos), que tiene un financiamiento internacional, no sabemos para qué se está utilizando.

 Si esto no es un ajuste, ¿qué es?

Lo de las jubilación requiere una nota aparte, pero podemos afirmar que mientras el costo de vida en los últimos meses pegó un salto del 100%, las jubilaciones solo se incrementaron un 35%. Lo cual es una especie de congelamiento criminal contra gente que aportó toda su vida.

Como si todo esto fuera poco, en el ministerio de la “billetera abierta” (Capital “Humano”) arrecian los despidos. En los últimos días echaron a más de 1.200 trabajadores de diferentes áreas. Faltan funcionarios por retrasos en nombramientos. En varias ocasiones los responsables de diferentes áreas amenazaron con renunciar por falta total de presupuesto.

Lxs trabajadorxs, para mejorar nuestras condiciones de vida, solo tenemos el camino de la lucha hasta derrotar el plan motosierra. Que Clarín siga mintiendo, nosotros vamos por lo nuestro.

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