Al cabo de seis años como legislador, Claudio Del Plá vuelve a su trabajo en la docencia. Del Plá presentó al gobierno saliente y al entrante su reclamo para ser reincorporado, sea en la escuela primaria o en un cargo en el nivel polimodal. Cientos de docentes de toda la provincia apoyaron con su firma este reclamo. Había sido separado de ambos cargos arbitrariamente. El gobierno saliente ha designado a Del Plá en un cargo interino en el Colegio Aráoz, pero ha rechazado designarlo como titular en la enseñanza primaria a pesar de que reúne desde hace tiempo todos los requisitos para acceder al cargo.

La negativa del gobierno saliente a restituir a Claudio del Plá a puesto en la educación primaria es la continuidad de una sistemática persecución contra su actividad gremial, que arranca en 1991 cuando Virgilio Choque, secretario general de la ADP, lo excluye arbitrariamente del padrón de afiliados para impedirle el ejercicio de sus derechos gremiales. Esto ocurre luego de que una lista opositora encabezada por Del Plá ganara la elección entre los docentes de la Capital y saliera segunda por escaso margen en todo el territorio provincial.

En diciembre de 1998, Claudio Del Plá fue designado preceptor en el Colegio América Latina de Villa Lavalle de acuerdo con el cuadro de puntaje de ese establecimiento. Arbitrariamente se dispuso que Del Plá no podrá hacer efectivo ese nombramiento hasta tanto se disponga la “partida presupuestaria”. Nunca Del Plá pudo hacer efectivo aquel nombramiento. En 1999 es designado en la escuela de Atocha, pero la designación es revocada por la Secretaría de Gestión Educativa, sin fundamento alguno, en sólo 48 horas.

En el 2000 se lo suspende por la denuncia de la directora de EGB de distribuir volantes de la agrupación Tribuna Docente que cuestionaban la política del Ministerio de Educación. Uno de los volantes en cuestión, aportados como “prueba” en el sumario, convocaba ya en esos años a una asamblea autoconvocada de docentes.

En 2003, el ministro Fernández y el vicegobernador Wayar firman un decreto que justifica la suspensión por tres años aun sin haberse comprobado ninguna falta de parte del docente.

Desde ese año Del Plá se ha presentado en todas las convocatorias a titularización, la última de ellas en febrero de 2007, y aún reuniendo los requisititos de antigüedad y puntaje se le negó la titularización en nombre de que no había estado ejerciendo la docencia el año inmediato anterior. Del Plá fue electo en diciembre de 2001 concejal por Salta capital y luego, en 2003, diputado provincial por el Partido Obrero, lo que hacía de imposible cumplimiento el requisito de ejercer la docencia el año inmediato anterior. Esto, además de la aberrante e injustificada suspensión por tres años que sufrió desde marzo de 2000 en adelante.

Siendo legislador peleó siempre por la defensa de la escuela pública y de los derechos de los docentes. Por ello fue preso, aún contando con fueros parlamentarios, en la “noche de las tizas”. Recientemente, el oficialismo pretendió sancionarlo (junto al diputado Pablo López, también del PO) por acompañar en la última huelga todas las medidas tomadas por los maestros.

Frente a esta persecución burocrática-estatal que lleva ya más de quince años, reivindicamos la trayectoria de lucha consecuente de Claudio Del Plá. Exigimos el cese de toda persecución sindical o política.