El indec dio a conocer los números de la inflación para el mes de octubre, alcanzando un 6,3% de aumento y colaborando con la proyección de que se supere el umbral del 100% de aumento en los precios para todo el año. El gobierno entre los principales responsables, con subas en los servicios (tarifazos), aumentos en las prepagas y fuerte impacto en los alimentos.

De esta manera, la inflación acumulada en todo el año asciende al 76,6%, con un aumento interanual de los precios del 88%. Se destacan las subas en los rubros de Comunicación (12,1%), Vivienda y servicios (7,5%), Salud (7,1%) y Alimentos y bebidas (6,2%).

Según las estimaciones del Relevamiento de Expectativas de Mercado (REM) del Banco Central, la inflación llegará a un acumulado del 100% al culminar el año. Algo que las consultoras privadas afirman que superará dicho umbral.

El gobierno no solo ha fracaso en toda su política fraudulenta de control y regulación de precios, sino que se vale de esta situación para hacer una diferencia entre la recaudación fiscal y el gasto público, que en gran medida ha sido limitado y recortado para garantizar las premisas y lineamientos pactados con el FMI.

Esta operatoria también funciona en relación a los salarios de la Administración Pública Central, donde el gobierno actualiza los pagos a destiempo, lo que le permite embolsarse una diferencia que es destinada al mismo propósito de garantizar las acreencias del capital financiero, o al subsidio de los capitalistas.

Los registros actuales de inflación se encuentran entre los más elevados de las últimas tres décadas, e impactan particularmente contra los trabajadores y su poder adquisitivo.

La política inflacionaria está íntimamente vinculada al pacto del gobierno con el FMI, gracias al impacto de la liberación de las tarifas, la devaluación, la suba de las tasas de intereses y los distintos mecanismos del gobierno para sostener las ganancias capitalistas, como la variedad de regímenes y/o modalidades cambiarias.

La ministra de Trabajo Kelly Olmos reconoció que el gobierno no libra ninguna “guerra contra la inflación”, con sus dichos sobre el Mundial y la inflación. El escandalo fue tal que tuvo que pedir disculpas públicamente.

La verdadera lucha contra la inflación la libran los y las trabajadoras de la salud en pie de guerra; o los trabajadores del Sutna que arrancaron un aumento superior al 100%; o los docentes y estatales que luchan por el salarios; y así todos los sectores que libran una pelea por una recomposición salarial en medio del ajuste del gobierno. Lucha que tiene como principal ausente a la burocracia sindical de todo pelaje.