Políticas

3/7/2021

“Con Fernández y Sáenz, Argentina se integra a la producción de litio como ‘país bananero’”

Denuncia del diputado Claudio Del Plá en la Legislatura salteña.

El Senado y la Cámara de Diputados de la provincia han aprobado un proyecto de declaración rechazando lo que se supone serían las intenciones de Alberto Fernández de nacionalizar el litio, con el único voto en contra del diputado del Partido Obrero. La declaración expresa la postración de la Legislatura salteña y de todos sus partidos ante las multinacionales que pretenden llevarse este recurso estratégico en el marco del régimen de saqueo de las riquezas minerales que viene del menemismo, y con sus consecuencias nefastas para el medio ambiente.

En su extensa exposición, que puede verse íntegra en el video adjunto a esta nota, Del Plá desnudó la complicidad de todas las facciones del régimen con las mineras, en línea con lo que viene ocurriendo en Mendoza, Chubut y Catamarca.

Aquí algunos conceptos de su intervención:

“El litio es un recurso no renovable de mucha importancia económica, y de una importancia estratégica en el cambio tecnológico que se está dando en el mundo, especialmente en el uso de automóviles eléctricos y producción de baterías. Hay una demanda mundial importante, un precio alto y una concentración elevada de reservas, en el Norte Argentino, Chile y Bolivia, por lo que estamos siendo el centro de atención de todas las multinacionales del ramo. En Jujuy está Toyota, en Salta y Catamarca BMW, grandes fabricantes de automóviles que ya están tratando de acaparar el negocio. Las mismas anuncian que dentro de 10 años fabricarán un alto porcentaje de automóviles con motores eléctricos. Entonces, hay un insumo fundamental para explotar, con precio muy alto, con un costo muy barato de producción en esta región, por sus condiciones naturales, que puede ser obtenido con tecnología que la Argentina ya tiene”.

“Salta está insertándose en la producción de litio en un modelo colonial, es decir como productor de materia prima, participando de una parte ínfima de la renta, en forma de regalías en el marco de la ley menemista que estableció un tope del 3% y la estabilidad jurídica por 30 años para las mineras. Si defendieran los intereses de la provincia como dicen, deberían comenzar por exigir la derogación de esta ley de la vergüenza. Se ponen el poncho salteño pero son los agentes políticos de la vieja oligarquía, cómplice de las multinacionales que saquearon los recursos naturales de Salta desde siempre. No existe ni siquiera intención de industrializar el recurso, el 90% de la renta que se obtiene del litio en sus distintas fases de industrialización se va a quedar en los países imperialistas. Esta política es común a Fernández y Sáenz.”

Siguiendo la exposición, la bancada del PO también destacó los estudios científicos de Pía Marchegiani (directora de la Fundación Ambiente y Recursos Naturales, FARN), donde se explicitan las consecuencias ambientales gravísimas de las mineras. Se denunció la seria amenaza que encierra la explotación del litio para las fuentes de agua dulce que son escasas en la zona de la puna, lo que ha motivado en el caso jujeño, planteos de las comunidades originarias ante la Corte Suprema, porque ni siquiera se solicitó el consentimiento previo de las comunidades locales como exige la legislación.

El compañero Del Plá denunció la “Mesa del Litio” que formaron los gobernadores de Salta, Catamarca y Jujuy, como una alianza para mejor favorecer el saqueo de las mineras, ajena por completo a cualquier plan de industrialización o producción sustentable que haga de este recurso una palanca para salir de la pobreza extrema a los pueblos del Noroeste.

En el cierre de su intervención que fue recogida por varios medios locales, expresó: “la bancada del PO propone que se establezca el uso del recurso del litio como parte de un plan que coloque el desarrollo nacional en función de los intereses de los trabajadores, junto a la preservación del medio ambiente. Hace falta otra orientación social, una minería estatal con un plan de transición para el abastecimiento energético con energías renovables, que contemple el aspecto social y ambiental, con derecho a veto de los pueblos para controlar esta producción en la zona, e industrialización para crear miles de puestos de trabajo estables. Esto requiere un viraje de fondo, donde gobiernen los trabajadores y superar definitivamente los gobiernos entreguistas de una clase capitalista completamente parasitaria y antinacional”.