A un mes de las elecciones generales, el cuadro político todavía no sale de su convulsión por la crisis producida en Tucumán. Allí, el alevoso fraude cometido por el clan Alperovich desató una vasta movilización popular que forzó a un fallo que anulara las elecciones. A pesar del salvataje que le brindó la Corte provincial, el fraude como un recurso del régimen político quedó expuesto de forma cruda ante el conjunto de la opinión pública. El fraude no se limitó al robo de boletas o la quema de urnas, sino que fue preparado previamente con la presentación de miles de acoples y un despliegue inaudito del aparato clientelar de punteros. Nuestro partido denunció desde la primera hora la maniobra de los acoples y, mientras conquistamos la libertad de nuestros compañeros injustamente detenidos, impulsamos una consigna (“nuevas elecciones sin acoples”) que empalmara con el ánimo del movimiento popular.

 

Pero Tucumán fue sólo la punta del iceberg. En Chaco, en un intento por polarizar la elección e impedir una voz de los trabajadores, el PJ intentó dejar afuera al PO en la categoría diputados de las generales. Tras una intensa batalla política y judicial, que incluyó conferencias de prensa, denuncias públicas y presentaciones jurídicas, logramos revertir la maniobra en el escrutinio definitivo y ganar nuestro pasaje a las generales. No podemos descartar que para entonces no haya nuevas maniobras fraudulentas contra el Frente de Izquierda con el objetivo de impedir nuestro ingreso al Congreso en algunos distritos. Contamos con el antecedente de la banca de Córdoba que la UCR robó a la compañera Liliana Olivero en 2013.

 

La “red de fiscales” para octubre propuesta por Massa, Macri y compañía es un artilugio que pretende ocultar que ellos mismos son practicantes activos de maniobras fraudulentas con punteros allí donde gobiernan.

 

Reunir miles de fiscales en todo el país

 

Ante este escenario, largamos una campaña masiva de fiscales para defender el voto al Frente de Izquierda que garantice el ingreso de más diputados al servicio de los trabajadores. En las Paso, sólo la Lista Unidad logró movilizar más de 10 mil compañeros en la fiscalización desde La Quiaca a Ushuaia. Nos proponemos superar ampliamente ese objetivo y llegar a un fiscal cada tres mesas en los principales distritos.

 

En particular, nos proponemos realizar una fuerte campaña en Tucumán, Chaco, Córdoba y, por supuesto, la madre de todas las batallas: la provincia de Buenos Aires. Otro objetivo especial será defender la boleta del PO y el FIT en Santa Cruz, Formosa y Misiones, donde nuevamente el PJ pondrá en marcha cientos de sublemas para distorsionar y confundir el voto de la población.

 

Ya está en marcha la convocatoria a las primeras reuniones abiertas en los locales partidarios para sumar a todos los simpatizantes y amigos del FIT que quieran colaborar con esta tarea. Al mismo tiempo, hemos largado una campaña por redes sociales para sumar a todos los votantes del Frente de Izquierda.

 

¡Manos a la obra!