Luego de que nuestro legislador, Eduardo Salas, hiciera público un proyecto encargado por el ministro de Agua, Ambiente y Servicios Públicos, Fabián López, a la consultora Quantum sobre el marco regulatorio de la energía eléctrica, se suscitó un enorme revuelo político en Córdoba. Sucede que el informe establece, lisa y llanamente, el desguace de la empresa provincial EPEC para proceder a su privatización. La denuncia tuvo repercusión en todos los medios locales, y las dudas sobre la veracidad del mismo que dejaron entrever sectores cercanos al gobierno fueron rápidamente sepultadas cuando Salas publicó la resolución oficial que contrata a la consultora por $3.776.904. En esa misma línea Luis Giovine, el presidente de EPEC, reconoció el vínculo con Quantum, especializada en procesos de privatización energética en Latinoamérica.

Desde el gobernador Schiaretti para abajo, ningún funcionario salió a responder, pero la crisis fue tal que trascendió, nuevamente de mano de Salas, que en días se dará a conocer el proyecto oficial a través del Consejo Asesor de Políticas Energéticas de Córdoba (Capec). Dicho consejo, digitado desde el Ejecutivo, está integrado por funcionarios, cámaras empresariales e industriales, con nula participación de usuarios y trabajadores de la energía, que claramente serán los afectados por el nuevo marco regulatorio.

Como hemos venido denunciando, desde el primer día en que Schiaretti comenzó su ataque contra los trabajadores de EPEC, la intención última es la privatización. El gobierno provincial se ajusta a las demandas del FMI que, entre otros guadañazos sobre los trabajadores, indica la necesidad de desmantelar las empresas estatales. El ataque al convenio lucifuercista, el vaciamiento de distintas áreas, la tercerización, las jubilaciones anticipadas forman parte del recetario menemista de privatización, quieren crear ´mejores condiciones´ de negociación para los privados.

El activismo de Luz y Fuerza valoró la iniciativa como un apoyo a su lucha. La intensa campaña que hemos desarrollado desde el Partido Obrero para echar luz sobre las verdaderas intenciones del gobierno, ha dado vuelta las maniobras oficiales que pretendían discutir sobre los ´supuestos privilegios´ y los ´costos´ laborales, con el fin de ganarse a una porción de la población contra los trabajadores de Luz y Fuerza. Ahora la cosa es diferente, discutimos privatización, tarifazos sistemáticos y negociados sobre activos estatales.

Redoblemos la campaña. Llamamos a todos los trabajadores a intervenir contra la privatización y apoyar la lucha de los trabajadores lucifuercistas, su victoria es la victoria de todos los trabajadores de Córdoba, un freno a estas pretensiones espurias del PJ.