Políticas

21/3/2007|984

Cristina, bombera


La presencia de Cristina Kirchner en el acto por el aniversario del atentado a la embajada de Israel constituyó un claro apoyo a la posición internacional del régimen sionista. Las víctimas del hecho fueron un pretexto e incluso una cobertura mediática para esta operación fundamental. La preservación de la posición internacional de Israel es uno de los grandes ejes de la política mundial —a esto se reduce todo lo que ocurre desde el Medio Oriente hasta el oeste de Asia Central. La señora del Presidente se apresta ahora a festejar con uno de los ‘lobbys’ sionistas más reaccionarios, el de la Daia de Venezuela, enfrentado a Chávez. Así se producirá en Caracas la réplica del acto kirchnerista en Buenos Aires.


 


Cristina también va a Ecuador, por donde ya pasaron varios ‘asesores’ argentinos, que le han recomendado al presidente Correa que renegocie la deuda sin declarar el default. O sea que lo haga sin contar con ningún elemento de coacción a los acreedores. La senadora itinerante pasará por Quito para transmitir la misma monserga.


 


Algunos medios ya han insinuado que una candidatura presidencial de la mujer del Presidente estaría relacionada con un replanteo de la política oficial a partir de 2008, que dejaría de oscilar entre la demagogia y el entreguismo, para alinearse ‘responsablemente’ con lo que, en la Casa Rosada, se espera sea un gobierno demócrata en Estados Unidos.