La Sala V de la Cámara en lo Contencioso Administrativo Federal declaró esta semana la inconstitucionalidad del decreto 70/2017 que modificaba la ley de migraciones, sancionado por el macrismo en enero de 2017.

El fallo es el resultado de la lucha de las organizaciones de inmigrantes, que desde el primer momento salieron a las calles a denunciar un decreto xenófobo que vincula a la migración con el delito.

Frente a este fallo, tan esperado por la comunidad inmigrante, se mantiene el alerta de que en los próximos días el Poder Ejecutivo interponga un recurso extraordinario ante la Corte Suprema. Por ello es el momento de reforzar la movilización y la denuncia contra este acto cobarde contra los inmigrantes, para garantizar que no se consume.

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Resolución y antecedentes

Los jueces analizaron que las estadísticas presentados por el gobierno eran deficientes para  argumentar la supuesta “Emergencia de Seguridad” que justificaba la reforma migratoria establecida en el decreto, que –entre otras cosas– avalaba la restricción al debido proceso; aceleraba el mecanismo sumarísimo de expulsión aplicable a cualquier extranjero –sin consideración a sus circunstancias personales– tenga o no con antecedentes penales; modificada los requisitos para acceder a la ciudadanía; establecía la detención administrativa de migrantes y se  arrogaba, a su vez, la facultad exclusiva de decidir la separación de padres e hijos sin intervención judicial.

Desde el Polo Obrero y el Partido Obrero hemos acompañado las convocatorias en las calles. A su turno, desde las bancadas del Frente de Izquierda –y en conjunto con organizaciones sociales políticas, inmigrantes y de Derechos Humanos– denunciamos en dos audiencias públicas en el Congreso de la Nación, que el DNU 70/2017 es ilegítimo e incompatible con los estándares constitucionales y de derechos humanos, yendo contra los convenios internacionales de los que Argentina es parte.

La continuidad de la lucha de los inmigrantes está planteada, a su vez, porque la movida del gobierno colocó nuevas dificultades para la aplicación de la ley de migraciones 25.871, aumentando la vulnerabilidad de la comunidad. Pero el macrismo no arrancó de cero: el gobierno kirchnerista, que se vanaglorió de defender los derechos de los inmigrantes,  recién reglamentó en 2010 la ley señalada, cuando la misma había sido promulgada en 2004. La xenofobia estuvo instalado en el mismo poder político K, desde su secretario de Seguridad Sergio Berni –quien impulsó en su momento reformas xenófobas en la línea actual del macrismo– hasta su hasta hace poco alfil en el Congreso, Miguel Pichetto.

Por un segundo Paro Migrante

Las políticas anti-inmigratorias de Mauricio Macri se colocan como continuidad y profundización de toda una orientación de la clase capitalista, que busca en el odio racial una cortina de humo para distraer de sus verdaderos fines políticos de ajuste y represión hacia la clase trabajadora y sus sectores más vulnerables: la juventud, los jubilados, los inmigrantes.

Vamos por un nuevo paro migrante. Salgamos a las calles por la anulación definitiva del DNU 70/2017 y en repudio a los proyectos de los diputados Petri (PRO) y Gabriela Burgos (UCR) que intentan aprobarse en el congreso, para arancelar la salud y educación a extranjeros.

#MigrarNoEsDelito

#AnulaciónDefinitivaDelDNU70