Políticas

16/5/2002|754

El 1° de Mayo de la FTV y la CCC

El pasado 1° de Mayo permitió observar, en la Plaza Congreso, una nueva alianza, la de la CTA, la CCC, la UOM y el Frenapo. No fue un acto contra el régimen, por eso no estuvo encabezado por el “que se vayan todos”; no fue un acto contra el gobierno, por eso estuvo ausente el “fuera Duhalde y el FMI”. No fue, ni mucho menos, un acto contra la burocracia sindical, siendo que una de sus representaciones más emblemáticas, la UOM de Brunelli, Gdansky y Recúpero, participó como convocante. Al banquero Carlos Heller, el Frenapo se avergonzó de presentarlo en público.


En Congreso, la CTA convocó a un paro general “a realizarse este mes”, que podría tener como fecha probable el 29 de mayo, aniversario del Cordobazo, pero que está desgajado de todo plan de lucha y de toda perspectiva, como lo muestra la traición de Ctera a las luchas docentes.


¿Piqueteros oficialistas?


La FTV (CTA) y la CCC han definido una política muy especial frente a Duhalde. “Con la conflictividad social en veloz crecimiento *dice La Nación (22/4)*, Duhalde se propuso mantener a los piqueteros contenidos. Apenas asumió la presidencia, aseguró a un diputado de la Alianza que con D’Elía y Alderete no iba a tener problemas y que su preocupación eran ‘los troscos’… grupos que conforman el Bloque Piquetero (y) mantienen, en efecto, una política de choque con el gobierno”.


Para el PCR, precisamente, el programa para “jefes y jefas de hogar” que establece el “salario mínimo” de 50 dólares es “un triunfo parcial de los piqueteros”, y una “concesión” del gobierno, en opinión de la CCC (Hoy, 10/4). Luis D’Elía, el dirigente de la FTV, dice a su vez que para la CTA y la CCC existirían “códigos” que “los troscos no tienen”. Concretamente, “si el gobierno nos da diez planes, no jodemos más por esos diez” (La Nación, 22/4). Pero para “no joder” por planes de 150 pesos es necesario haber cruzado al otro lado de la frontera de clase.


Luis D’Elía postula una nueva Alianza, esta vez en torno del ARI (lo que lo ha llevado a chocar con su propia agrupación política, el Frente para el Cambio, que dirige Alicia Castro) y por lo tanto del Frenapo (Frente Nacional contra la Pobreza) al que pertenece D’Elía. De la dirección con el Frenapo participa la dirección del Instituto Movilizador de Fondos Cooperativos y del Banco Credicoop, que apoyaron el megacanje de Cavallo y la devaluación. Carlos Heller, titular del Credicoop y una de las voces públicas del Frenapo, acaba de plantear, en la Universidad Nacional del Comahue, que la Argentina “no debería no desear (sic) recibir ayuda del FMI”, toda una definición estratégica (Río Negro, 9/4).


En oposición a esta política de derrota para la clase obrera, llamamos a la FTV (CTA) y a la CCC a romper con el gobierno y a luchar, junto al resto del movimiento piquetero, por pan y trabajo, para “que se vayan todos”.