Políticas

15/1/2021

El cierre de Ford en Brasil, su impacto en la Argentina

Por la unidad de los trabajadores.

El rechazo al cierre y a los despidos en la Ford, la Mercedes Benz y otras metalmecánicas brasileras no es solo un problema nacional. Aquí están actuando con planes internacionales poderosas empresas imperialistas. Ford dijo que la producción que rescindirá en Brasil sería cubierta con importaciones de la India y otros países.

Anunció que invertirá 500 millones de dólares en la Argentina para fabricar un nuevo modelo y 50 millones en Uruguay para una armaduría. Las burocracias sindicales de Argentina y Uruguay no se pronuncian frente a los cierres y despidos masivos en Brasil. Especulan con que eso los puede beneficiar en “desarrollar” sus economías “nacionales”. Las burocracias se colocan -y pretenden colocar a los trabajadores- bajo la defensa de “su” clase burguesa. Ni siquiera está claro aún el balance entre despidos y nuevos puestos de trabajo en la Ford Argentina. Porque el nuevo modelo se ve contrapesado con la eliminación de la producción que era exportada a Ford Brasil para el armado de vehículos allí. En cualquier caso, en Argentina se ha constituido una “Mesa sectorial automotriz” en el marco del pacto social que el gobierno de Alberto Fernández está impulsando, constituida por funcionarios del gobierno, las cámaras patronales y los sindicatos metalúrgicos y mecánico del ramo, que avanzó en la aprobación de los lineamientos para presentar en febrero un proyecto de ley al Congreso, de “impulso” al sector. En un comunicado público se adelanta que contendrá clausulas de “Fomento a nuevas inversiones: Define una serie de beneficios para todas las inversiones futuras realizadas por empresas industriales radicadas en Argentina”. ¿Vamos a otro festival de subsidios y de flexibilización laboral para “atraer” inversiones capitalistas?

Los obreros de las fábricas automotrices argentinas nada saben sobre su contenido. Es necesario reclamar que se informe del mismo en asambleas.

Contra la estrategia de la colaboración de clases con las patronales y contra la competencia por subsidios fiscales y mayor explotación de los trabajadores tenemos que oponer la independencia de las organizaciones sindicales y la unidad de los trabajadores de Brasil, Uruguay y Argentina.