El escándalo de las vacaciones VIP del ex jefe de Gabinete, intendente de Lomas de Zamora y ahora excandidato a primer concejal por Unión por la Patria, Martín Insaurralde, ha destapado una olla de corrupción y manejos “discrecionales” que envuelve a todo el armado oficialista lomense y sus alcances en la legislatura bonaerense.

Tras renunciar a la jefatura de Gabinete bonaerense, el pasado viernes 29, Insaurralde acaba de bajarse de la candidatura a primer concejal por Lomas de Zamora, donde secundaba a su apadrinado político y mano derecha el actual presidente de la Cámara de Diputados de la provincia de Buenos Aires Federico Otermín.

El escándalo abrió todo un debate no solo por lo obsceno de la opulencia y el derroche de un referente provincial del oficialismo en medio de una crisis social y económica que sacude a millones de trabajadores gracias al ajuste que implementa el propio gobierno nacional, sino también por los interrogantes respecto al origen sospechosamente fraudulento y corrupto de la fortuna con la que el exfuncioanrio, excandidato y actual intendente costea sus “placeres”.

Insaurralde es apuntado por varios negociados, uno de ellos por supuesto enriquecimiento ilícito en los noventa momento en el que se lo imputa como “recaudador” de la caja de los casinos de la provincia de Buenos Aires, cuando Eduardo Duhalde era gobernador y su padrino político, el exintendente Jorge Rossi estaba al frente, primero, del Instituto Provincial de Lotería y Casinos y, luego, de la Lotería Nacional.

Esta misma sospecha es la que se erige también sobre su apadrinado, Federico Otermín, con responsabilidades más que claras en el caso de “Chocolate” Rigau, siendo quien emitía las tarjetas de débito involucradas en el fraude contra los fondos públicos.

Insaurralde es el jefe político de Otermín, lo que hace pensar que los alcances de los asuntos turbios del intendente lomense son más amplios que los negocios inmobiliarios en el distrito de las grandes edificaciones suntuosas de Las Lomitas, que tienen su contracara en los barrios pobres de Cuartel IX, sin presión de agua, instalación eléctrica reglamentaria ni gas natural, además de la falta de cloacas y otros pesares.

 

¿Dos escandalos o uno solo? Insaurralde es el jefe político de Otermin, presidente de la cámara que emitió las tarjetas de débito que cobraba el Chocolate Rigau. Solo el @FdeIzquierda reclama el esclarecimiento de toda esta corrupción, que pinta a todo un régimen político

— Guillermo Kane (@guillekane) October 2, 2023

Por otra parte, cuando Insaurralde se retiró a la jefatura de Gabinete para plantar bandera en la provincia dejó en la intendencia interina a la presidenta del Concejo Deliberante de Lomas de Zamora Marina Lesci, quien ahora pasaría al primer lugar en la lista local a concejales de Unión por la Patria.

Lesci es ahora acusada de un “manejo discrecional” de los fondos municipales, con un reciente subsidio –en agosto, luego de las Paso- de $13 millones al Club Social y Deportivo Defensores de Banfield, el cual ella presidió entre 2008 y 2021 y del cual parece que su padre es actual presidente, además de que otros miembros de su familia integran la comisión directiva.

Los (des)manejos financieros de la triada Insaurralde-Otermín-Lesci deben ser entendidos como parte de una orientación política, donde prima el enriquecimiento ilícito y los “favores” por sobre las necesidades populares.

Mientras los recursos del distrito son utilizados bajo la discrecionalidad de la triada oficialista los trabajadores municipales son precarizados por medio de programas como el Eco Lomas, o los y las trabajadoras “contratadas” por dos pesos del centro de monitoreo local, entre algunos de los casos.

La propia Lesci estuvo a cargo de la Secretaría de la Mujer distrital durante un periodo donde tuvo que reconocer un aumento del 30% en las denuncias por violencia de género, en un distrito con un centro de mujeres (Fátima Catán) con presupuesto y funcionamiento absolutamente limitados. El dinero no llega a destinarse a las necesidades populares porque se destina para otros propósitos patronales o directamente se pierde en los despachos del oficialismo y la oposición patronal.

La corrupción es inmanente al funcionamiento del régimen capitalista, lo que no exculpa a sus responsable sino que pone de manifiesto la naturaleza social de dichos entramados, sean bajo este gobierno o bajo las gestiones de la oposición patronal que tranza y negocia con estos, como ha quedado en claro con los chanchullos de Juntos por el Cambio en CABA, o la propia venta inescrupulosa de candidaturas de La Libertad Avanza. O como lo admitió Javier Milei, quien se encuentra dispuesto a recibir a todas las castas y defraudadores como Luis Barrionuevo.

Hay que investigar a fondo todas las implicancias políticas y penales en las denuncias vertidas para que sean condenados los responsables y se devuelva el patrimonio sustraído a la población trabajadora. La apertura de los libros contables del municipio a los trabajadores y vecinos. Pase a planta permanente de todos los trabajadores municipales precarizados y ampliación del presupuesto para los servicios municipales, como la atención a las mujeres víctimas de violencia de género.

Una utilización de los recursos en manos de los trabajadores en función de sus necesidades e intereses, confiando en su propia organización política independiente como clase, y no en los ladrones y ajustadores capitalistas que se candidatean para surfear el ajuste.

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