Políticas

27/3/2003|794

El extraño caso del Credicoop e Izquierda Unida

Nadie desconoce el papel que viene jugando desde hace mucho tiempo el banquero Carlos Heller para que el Estado asuma con fondos públicos los perjuicios que los bancos dicen haber tenido con la pesificación, los amparos y, ahora, una eventual redolarización. Carlos Heller es el presidente del Banco Credicoop, que también maneja una Afjp; los fondos de jubilaciones, como también lo sabe todo el mundo, reclaman la redolarización de la deuda pública que se encuentra en su poder. Carlos Heller participa, en sus gestiones de lobbista banquero, junto a Mario Vicens, el presidente de la asociación de bancos extranjeros. Lejos de reclamar el desconocimiento de la deuda externa, Heller ha conseguido un seguro de cambio para la deuda externa de los bancos, que se paga con fondos públicos.


Este mismo Heller integró el Frenapo, con la Cta, es decir el movimiento de combate a la pobreza. Su banco integra también el Instituto Movilizador de Fondos Cooperativos, que se encuentra dirigido por líderes del Partido Comunista “en Izquierda Unida”. IU reclama, según sus humores, la suspensión o no pago de la deuda externa. Los vasos comuicantes entre IU y el Credicoop son muy claros y no los desconoce nadie. Lo que no es claro es a qué juega Izquierda Unida y mucho menos por qué nunca denuncia a Heller y al Credicoop por sus planteos favorables a la patria financiera y al FMI.