Políticas

7/10/1993|403

El FIT en el Gran Buenos Aires

El FIT en el Gran Buenos Aires orilló el 2% de los votos. El grueso de la votación provino de los barrios donde se había realizado un intenso trabajo de agitación y proselitismo políticos. Las votaciones más altas se registraron en Lanús, (2,3%), Berazategui (2%), General Sarmiento y Florencio Varela (1,9%), donde en escuelas importantes hubo picos de 16 y 18 votos por mesa, un 5,5% del total. Se destacaron barrios como Los Polvorines, Pablo Nogués y Kilómetro 30, en Sarmiento; Ceballos y Barrio Luz, en Varela; Bernal Oeste de Quilmes, Castelar de Morón, Kilómetro 24 de La Matanza y Pellerano de Lanús, donde se registró casi el 4% de los votos como promedio.


El FIT fue la quinta fuerza política en el Gran Buenos Aires, delante de la Ucede (1,9 a 1,5) en todos los distritos, con la excepción de San Isidro y Vicente López; la cuarta fuerza en Escobar, delante del Frente Grande, y muy pareja con éste en Florencio Varela.


Conspiró contra una votación mayor en el Gran Buenos Aires la falta de boletas en algunos distritos claves como  Sarmiento, Tigre, San Martín y Quilmes, que fueron repuestas por los fiscales recién después de las primeras dos horas.


En las mesas existió una política intimidatoria por parte de los fiscales del PJ y de Rico contra todas las corrientes de izquierda y en algunos casos contra los presidentes de mesa (los cuales, significativamente, este año eran gente sin experiencia). Sólo la presencia de casi 2.000 fiscales del FIT impidió una acción más ostensible de estos punteros y logró que se mantuvieran las boletas del FIT.


Hay que tener en cuenta el voto al Mas, que no refleja en nada su nula campaña.  Muchos de los que pretendieron votar a Zamora lo asociaron con el Mas. Es por esta razón que el Mas registra un 0,7% sin casi haber aparecido físicamente en el Gran Buenos Aires durante la campaña.


Cinco semanas no fue tiempo suficiente para dar a conocer al FIT más allá de la vanguardia. Incluso la propaganda televisiva a cargo del MST contribuyó a mantener la confusión con el Mas, al no hacer hincapié en el frente y en la unidad de la izquierda. Diez años de un nombre asociado a un partido no pueden superarse sino mediante un intenso trabajo de delimitación, que subrayara la unidad de la izquierda y la construcción de un nuevo Frente.


De conjunto, el resultado del FIT en el Gran Buenos Aires reflejó unos 80.000 votos de la vanguardia fabril, barrial y estudiantil.


El PO dentro del FIT realizó una excelente campaña política. Sólo Jorge Altamira habló en más de doscientos medios radiales, escritos y televisivos. El PO intervino en casi 900 medios de prensa; agitó con camiones e incluso con aviones los principales barrios y distritos del Gran Buenos Aires; realizó más de 40 charlas políticas y en más de 30 mesas redondas se destacaron los candidatos zonales del PO. Todo esto, sin contar los actos de la Federación de Box, la Fiesta de la Juventud y los actos de Mar del Plata, La Plata, General Sarmiento y Ciudadela, que fueron realizados conjuntamente con el MST y que resultaron un verdadero éxito.


Mil fiscales reclutó el PO en el Gran Buenos Aires.