Políticas

1/6/1994|420

El FUT frente a la Constituyente

El gobierno provincial creyó que la elección del 10 de abril plebiscitaría su política y le daría los dos tercios de los cargos para gobernar solo. Como en todo el país, le salió el tiro por la culata y perdió 5.000 votos que fueron capitalizados por el FUT, alcanzando por poco la mitad más uno de los convencionales que, en principio, le aseguran la reelección.


El sentido de la intervención del FUT


El FUT lucha en todos los frentes para desbaratar los planes de la burguesía e impulsar las reivindicaciones de las masas.


Desde este ángulo nuestra intervención constitucional busca hacer fracasar la reforma reaccionaria, y utilizar la Constituyente como una tribuna de propaganda y agitación.


La primera fase de nuestro objetivo, en la campaña electoral, demostró las posibilidades de fortalecimiento de un polo revolucionario. La campaña demostró que aun en el terreno electoral la calidad de nuestras denuncias del pacto y la reforma reaccionaria trabajaba sobre el terreno fértil del descontento popular.


Hemos utilizado una convocatoria cuyo destino era fortalecer a la reacción, para potenciar una fuerza revolucionaria.


La segunda fase tiene que ver con la intervención de nuestro bloque en el seno de la convención misma.


No existen expectativas populares en el debate constitucional. Pero nosotros debemos esforzarnos por crear expectativas en la intervención de nuestro bloque del FUT. Somos los únicos interesados en que el debate gane la calle y ante todo que haya debate, ya que se pretende imponer trabas reglamentarias para impedir la discusión. Se trata, ante todo, de una tribuna privilegiada para desenmascarar los planes antidemocráticos de los partidos de la “democracia” y de propaganda de nuestros planteos revolucionarios.


No tenemos el objetivo de mejorar la constitución provincial, sino demostrar que la quieren “empeorar”; presentamos propuestas alternativas para apoyar nuestras denuncias.


La idea es seleccionar algunos temas para concentrar la atención de la opinión pública en esos debates. Esta actitud permitiría desarrollar una impugnación de conjunto de la reforma.